Desde muy jóvenes nos tienden a decir que emprender es muy importante, aunque los tiempos que corren no son la mejor motivación para que la gente se lance a la piscina. Sin embargo, siempre hay valientes que se atreven y se embarcan en proyectos ambiciosos.
En esos casos, además del esfuerzo y el trabajo, la ilusión y la inocencia pueden ser las mejores armas para construir “un gran imperio”.
Eso es lo que precisamente ha sucedido con el OTSO vi half gasteiz, la prueba de triatlón de media distancia con dos ediciones a sus espaldas que nació con la idea de poder ser un proyecto para que la gente estuviera satisfecha con el deporte que ama y ha acabado siendo un gigante que, además, aún tiene mucho recorrido por andar.
“No esperaba esta aceptación y ahora ya es muy difícil parar la maquinaria con los números tan positivos”
Sus creadores, Alain Fontecha y Eneko Alonso García aún recuerdan con nostalgia y una sonrisa el día que decidieron comenzar con esta experiencia. “La idea fue de Eneko, que viene del ciclismo y me comentó que llevábamos cuatro años desde la aparición de Ironman y que además había desaparecido la media distancia y que creía que había muchas posibilidades como el recorrido de la carrera a pie que podía tener una gran acogida por Gasteiz”, señala el primero. Es más, Alain al principio se lo tomó como un hobby, “era mi pasión y no sabía que iba a llevar tanto trabajo, pero poco a poco fui involucrándome más porque así lo requería la prueba”.
Por su parte, Eneko confirma lo comentado por su compañero. “Era un pensamiento que tenía para que alguien lo pudiera sacar adelante. Yo no tenía previsto que fuera uno de los encargados hasta que un día hablé con Alain y nos pusimos manos a la obra, aunque nos pareciera una pequeña locura”.
Es más, ambos señalan que “lo que empezó siendo como una broma en el buen sentido, acabó siendo un proyecto muy bonito para la ciudad y eso es una motivación extra porque creemos que era una prueba que la gente estaba demandando”.
En cuanto a la segunda edición celebrada el 3 de junio, tanto Alain como Eneko se muestran muy contentos. “La verdad que estamos muy satisfechos con el trabajo realizado. Es cierto que somos conscientes de que siempre hay cosas por mejorar, pero es un evento que ha crecido mucho en su segundo año y prueba de ello es que se ha doblado el número de participantes”, señala el primero.
Para Eneko, “me he sorprendido por la gran cantidad de papeleo que se tiene que hacer. Yo ya me imaginaba que tendría que hacer burocracia, pero no tanta. Por otro lado, el aspecto económico también es muy difícil porque tienes que poner la maquinaria en marcha, y partes del punto en que nadie te conoce y tienes que conseguir que todo el mundo apueste por ti”.
Un gran sacrificio
Eso sí, ambos reconocen que el crecimiento de la prueba ha ido de la mano del esfuerzo y del trabajo, ya que ha requerido mucha mayor implicación.
“Este año se ha necesitado de lo mejor de nosotros por todo el trabajo que ha habido, pero ha merecido la pena porque estamos muy contentos con el feedback de los participantes y con el recorrido de la prueba”, señala Alain.
La modestia en todavía la compañera de viaje para estos emprendedores alaveses. “Para nosotros ha sido una prueba de nivel de exigencia alta. Hay que reconocer que seguimos siendo pequeños y aún se necesitan muchísimos recursos”, confiesa Alain, dedicado ya en exclusiva a esta prueba.
“Si no hubiera sido así, literalmente habría sido imposible organizarlo todo. Hay muchos detalles para atender, tanto de cara a las instituciones como con los corredores, patrocinadores, voluntarios o sponsors. Son mil y un detalles y tienes que intentar controlarlos todos”.
Eneko aún mantiene su trabajo, aunque en su caso también reconoce que “es exigente y hay que sobrevivir; a veces se hace duro y hay que tirar para adelante buscando huecos donde no los hay”.
Eso sí, y a pesar de las horas invertidas, ambos solo pueden expresar felicidad cuando hablan sobre la segunda edición. “Ya hemos tenido un elenco de corredores muy amplio, pero somos ambiciosos y queremos que siga creciendo para que puedan venir figuras de talla mundial a un vi half, que creemos que tiene todos los ingredientes para que eso pueda ocurrir”, afirma Alain.
“Somos muy ambiciosos y queremos que vengan figuras de talla mundial en las próximas ediciones”
En este sentido, Eneko añade que “no esperábamos tanta aceptación y ahora ya es muy complicado parar esta maquinaria. Se ha convertido en un monstruo y tenemos números muy positivos con 37 provincias diferentes y tres nacionalidades distintas”.
De cara al futuro, y aunque aún falte prácticamente un año para que se celebre la tercera edición, ambos se muestran ya impacientes.
“Estamos con muchas ganas de que llegue ya la fecha para seguir dando un mejor soporte y poder tener más recursos para atraer a un número mayor de corredores, porque creemos que la prueba puede crecer muchísimo más”, afirma Alain.
A su juicio, “la idea es intentar profesionalizar la prueba y que así esta sea aún más atractiva para los corredores de fuera, pero a la vez no pierda la esencia que ya tiene de cara a los corredores locales”.
Por su parte, Eneko afirma que “es importante” buscar una financiación fuerte. “Ya es un evento grande y estamos creciendo mucho, pero no podemos soportar ese desgaste económico entre Alain y yo. Necesitamos más ayuda de las instituciones y de los patrocinadores, que por otro lado, ya lo están haciendo”.
Novedades
Además, los dos reconocen que tienen ideas en mente para la tercera edición, aunque aún no pueden desvelar. “Tenemos alguna sorpresa pensada para el tercer año, pero aún es complicado ponerlo sobre la mesa, por las fechas en las que estamos, pero alguna sorpresa sí habrá”.
Eso sí, ambos coinciden en que “hay que seguir trabajando la cantera con la carrera de los txikis o por ejemplo trabajar más en los días previos para poder hacer algo para atraer a la ciudad a los corredores de primer nivel”.
Además, Eneko añade que “estamos a la espera de que la Federación Vasca, Espacio Público y Policía Local nos den el permiso para publicar la fecha y en breve habrá novedades en muchos aspectos”.
Lo que está claro es que el crecimiento del vi half gasteiz ya es imparable y a buen seguro que seguirá dando pasos hacia delante para que así se pueda cumplir el sueño de los organizadores.
“Nos gustaría traer de nuevo a Vitoria el Campeonato del Mundo de media distancia. Eso lo tenemos en mente y estamos trabajando para que así sea. Estamos consiguiendo progresos incluso a nivel europeo, así que, ¿por qué no soñar con un Campeonato del Mundo como ya sucedió hace unos años? Creemos que se puede conseguir a corto medio plazo”, subraya Eneko.
Además, Alain está convencido de que la prueba reúne todos los ingredientes perfectos para ser especiales. “Ya desde un principio Eneko hizo un grandísimo trabajo con el circuito y nos desmarcamos de otros eventos y creo que somos únicos en ese aspecto. Además, algunos de ellos son claves, como el casco antiguo para así involucrar al comercio y a la hostelería”.