Tan típico como salir a rodar en bici o seguir el Tour de Francia por televisión es hacer una porra con los amigos, elegir cada uno a unos cuantos ciclistas y, al final de la carrera, cobrarse las deudas en una cena. Una manera, como aficionados al ciclismo, de dar un punto extra de emoción al Tour. Esa tradición la recogió hace 18 años Tropela, una página web que básicamente da a sus usuarios las herramientas para poder hacer esas porras. Su éxito desde que nació ha sido tremendo y a día de hoy es una página de referencia para los amantes del ciclismo vasco.
Tropela la crearon dos amigos guipuzcoanos, Egoitz Aldasoro y Oihan Odriozola. “Estudiamos juntos en el instituto y Oihan ya organizaba porras con un programa informático e imprimía las clasificaciones”, cuenta Egoitz: “Luego, después de estudiar cada uno su carrera, me acuerdo que nos juntamos en una cena y lanzamos la idea de hacer porras online, algo más serio, porque nos gustaba tanto la tecnología como el ciclismo. Hay que tener en cuenta que entonces no había Internet en los móviles y esas cosas, pero lo de las páginas web ya se empezaba a mover. Al final lo que queríamos era transformar esa pequeña porra entre colegas en algo más amplio. Hacer una página web nos permitía eso”.
Al proyecto de Egoitz y Oihan se unieron Eneko Illarramendi y Jon Zubizarreta, también guipuzcoanos, que les ayudaron a “crear” tropela.eus, que nació en vísperas del Tour de Francia de 2005. Se podría decir que, en una sociedad como la vasca aficionada a las apuestas y las porras, el éxito fue instantáneo. “Participaron 2.800 personas. Nos movimos y tuvimos suerte. Cuando lanzamos la web se estaba disputando la Euskal Bizikleta, contactamos con algún corredor y hablamos con algún patrocinador. A la gente le gustó la idea, pero el colofón fue que ETB nos hizo un reportaje hablando de Tropela y eso explotó. Estábamos en menos de 1.000 participantes, fue salir en la tele y llegamos a esos 2.800”.
El estreno, en el Tour de aquel año, fue a lo grande. “La primera etapa tuvimos problemas para poner las clasificaciones. Éramos novatos y quizás teníamos que haber arrancado más suave, pero bueno, salió bastante bien y la gente acabó contenta”. Ese mismo año montaron la porra para la Vuelta a España y después la web siguió creciendo. En 2006 añadieron el Giro de Italia y los Mundiales en ruta y a día de hoy el calendario de porras es amplísimo e incluye varias pruebas femeninas: comienza en la Strade Bianche el 4 de marzo y acaba el 7 de octubre en Lombardía, con todas las grandes carreras entre medias. Como curiosidad, en la web se pueden ver todas las clasificaciones históricas... salvo las de 2005, “que se perdieron”.
A jugar
El sistema de juego es sencillo. Basta con darse de alta en la web (los datos introducidos deben ser verdaderos, se especifica en las reglas de participación) y ya se puede participar. “Hacemos una propuesta de juego en cada carrera, con la idea de hacerlo atractivo”, dice Egoitz. Cada usuario debe elegir un número de corredores dentro de una serie de listas que ofrece Tropela, por ejemplo: máximos favoritos, escaladores, esprinters, especialistas o cazadores (de etapa). “Intentamos que el proceso de elección de corredores sea un poco más interesante. Digamos que nosotros ponemos la plataforma y las herramientas. Luego cada uno, entre colegas, ya hace sus grupos y se juega dinero, cenas y cosas así. Eso depende de cada cual. El objetivo es participar y disfrutar del ciclismo”, explica Egoitz, que añade que “si es en euskera, mejor”. De hecho, Tropela nació “sólo en euskera”, aunque fueron “metiendo más idiomas” ante la demanda de usuarios de fuera de Euskadi.
De cara a este Tour que sale de Bilbao y que durante tres días recorre las carreteras vascas, se ponen un reto: llegar a los 20.000 usuarios: “Llevamos varios años con más de 18.000 y nuestro tope ha sido 19.500. Igual este año, al empezar aquí, superamos esos 20.000. Los medios de comunicación vais a hacer más seguimiento y seguro que ese eco llega a Tropela. También favorece que este verano no haya Mundial de fútbol”.
Jugar es “gratuito” y Egoitz reconoce que no viven, ni mucho menos, de esta página web: “Qué va. Tenemos nuestros trabajos. Esto es una pasión a la que dedicamos tiempo. Hemos crecido, pero nunca hemos pensado que íbamos a vivir de esto. Con patrocinadores soportamos los gastos y ya está. Es una iniciativa popular y el objetivo es que la gente participe. El proyecto es chulo y merece la pena”, cuenta Egoitz, el único junto con Eneko que continúa involucrado en la página web desde el inicio, aunque tienen “gente que se ha ido uniendo” y que les ayuda en otros apartados de Tropela, como son “los datos de los corredores, el blog, el podcast o el canal del Telegram”, activo y donde hay un buen número de aficionados hablando de ciclismo. Es la gran comunidad de Tropela, que une a los aficionados vascos al ciclismo.