Tras vivir una nueva edición de Gazterock, Hell Dorado debería haber empezado sus particulares vacaciones para coger fuerzas de cara a la próxima temporada de conciertos, pero hay oportunidades que no se pueden dejar escapar y por eso este sábado, va a abrir sus puertas de manera excepcional. La razón tiene nombre y apellido, Philip Anthony Campbell, quien fuera durante más de 30 años guitarrista de Motörhead.

Es conocido, porque desde el particular infierno de la calle Venta de la Estrella nunca se ha ocultado, que uno de los grandes sueños de la sala siempre fue poder tener al fallecido Lemmy Kilmister entre sus paredes. Hay cosas que ya no tienen remedio, por desgracia. Aún con todo, Phil Campbell sigue sobre los escenarios y va a acudir esta semana a la capital alavesa junto a The Bastard Sons, proyecto que el músico galés creó en 2016 tras la disolución de Motörhead por la muerte de su carismático líder.

Aunque el concierto se produce fuera de temporada, las costumbres en Hell Dorado no van a cambiar de cara a este sábado. Es decir, las puertas del espacio se abrirán a las 21.00 horas, quedando todavía algunas entradas disponibles que se pueden conseguir por 28 euros en anticipada y 30 si se espera a pasar por la taquilla de la sala.

Protagonistas

Dos serán los reclamos de esta última noche de música en directo antes de tomarse un rato de descanso. El trío asturiano Green Desert Water va a ser el encargado de encender la noche.

La formación, que acaba de ser confirmado para la próxima edición del Planet Desert Rock Weekend a celebrar en Las Vegas (Estados Unidos), estará en la capital alavesa desgranando los temas de su último trabajo de estudio, Black Harvest.

Tras ellos será el turno de los de Campbell, que cerraron el año pasado con una doble referencia. Por un lado, un trabajo de directo que quiso responder al momento actual de la banda y, por otro, el disco Kings of the Asylum, que salió el pasado otoño. Con él bajo el brazo llegan ahora a Vitoria.