Es esta una semana importante para la temporada de invierno de la Red Municipal de Teatros. No siempre se acogen dos estrenos absolutos de manera consecutiva. El sábado y el domingo llegará al Principal La madre, con Aitana Sánchez-Gijón. Antes, este jueves, también levantará por primera vez el simbólico telón Oracle Island, de la compañía gasteiztarra Parasite Kolektiboa. En este caso, será en el Jesús Ibáñez de Matauco (centro cívico Hegoalde). Para ambas propuestas, cuyas representaciones arrancarán a las 19.30 horas, todavía quedan algunas entradas disponibles.

La cita más inmediata tendrá como protagonista al proyecto nacido de entre las paredes de la sala Baratza. Esta vez, tomando como referencia una propuesta de pequeño formato realizada para el Festival Internacional de Teatro de Gasteiz en 2022, Parasite propone un singular viaje a un resort ubicado en una isla volcánica. Se trata de un lugar en el que diferentes mujeres, que se encuentran en distintos momentos de cambios en la vida, comparten sus reflexiones, emociones y experiencias.

El público, el huésped

Lo hacen ante espectadores y espectadoras que el grupo entiende como huéspedes de ese resort particular y escénico, personas que acuden a la isla en busca de respuestas, “aunque seguramente salen con más preguntas”, como explica Hannah Whelan, responsable del concepto y de la dramaturgia de una obra que también interpreta junto a Marina Suárez (quien se encarga además de la dirección) y a Helena Wilhelmsson (encargada, asimismo, de la coreografía de la pieza).

“En realidad igual no es tan importante lo que se representa como las preguntas que cada persona se puede hacer” en torno a cuestiones como la propia construcción de la identidad, los mecanismos de la conciencia y la naturaleza de las relaciones entre los seres humanos y las nuevas tecnologías.

Un momento del montaje

Un momento del montaje Cedida

Todo ello se aborda siguiendo los sellos distintivos que caracterizan a Parasite Kolektiboa desde sus inicios. Es decir, todas las artes escénicas, e incluso las que trascienden a este ámbito, pueden ponerse al servicio del montaje. Pasa en Oracle Island también. Con ellas se busca generar una atmósfera determinada, una experiencia teatral que para el público no sea habitual, un relato en el que el humor también juega su papel sobre el tablero.

Así lo podrán comprobar quienes acudan este jueves a un Ibáñez de Matauco en el que las entradas están disponibles por un precio de 15 euros cada una. Toda vez en el interior del teatro, los huéspedes se encontrarán con un particular resort volcánico cuya iluminación –diseñada por Beñat Gorrono Besa– tiene una presencia importante, sin perder de vista el trabajo escenográfico de Tripak Kolektiboa y el sonoro de Patxi Suinaga. Es el momento del estreno, además en casa.