La sala Baratza es un centro dedicado a las artes escénicas situado en Gasteiz, concretamente en la Plazuela de Aldabe número 4. Tal y como lo explica el portal de Internet del propio centro, este alberga desde diciembre de 2013 diferentes actividades que favorecen la creación cultural, la cual emergente a través de diferentes disciplinas escénicas.

Dentro de una amplia gama de ellas, se incluyen la creación, la difusión, la exhibición y la formación.

En ese ámbito, precisamente, se circunscribe el Scratxe Gaua, que regresará a la sala este próximo sábado 16, dando el pistoletazo de salida a la programación cultural del recinto en este curso que está a punto de empezar. 

Tras la actuación de los artistas, habrá un pequeño coloquio donde los protagonistas van a poder charlar con el público sobre qué tal ha ido el evento o sobre lo que acontezca.

A finales del mes de mayo, el centro artístico emitió un comunicado donde explicaban su interés por buscar creadores, intérpretes, directores, compañías de teatro, coreógrafos, bailarines y músicos para esta jornada especial.

Tras haber estudiado las propuestas recibidas, desde el centro ya han decidido los profesionales más idóneos para llevar a cabo esta serie de actuaciones.

La primera artista en participar en el programa del Scratxe Gaua será la joven gasteiztarra Ane Gebara, cuya función de cuenta cuentos está curtida en 1.000 batallas. 

Seguidamente, le llegará el turno al dúo formado por la violinista eibarresa Andrea Berbois Laspiur y el cantautor de Usurbil Peru Galbete. Este dúo combinará la experimentación vocal, la improvisación y la performance de Galbete junto al talento como música de Berbois.  

No se hará esperar el tercer espectáculo. Será una exhibición de danza donde hará acto de presencia el Colectivo de Danza Lamajara. Este lo forman un grupo de seis personas, capitaneado por el onubense Daniel Rosado.

Exterior de la sala Baratza Alex Larretxi

El grupo lleva diez años elaborando proyectos de danza, por lo que cuentan con una vasta experiencia en el sector, que les ayudará a ofrecer un espectáculo a la altura de las expectativas. 

La cuarta actuación llevará las firmas de la actrices Amaia Irazabal y Ainhoa Alberdi. Ellas serán las encargadas de ofrecerle al público vitoriano una show ejemplar de ópera bufa. Este subgénero de la ópera tradicional, procedente de Italia, se caracteriza por el uso de las temáticas cómicas en sus interpretaciones. 

La guinda del pastel la pondrá el artista Gabi Pedrosa, con su obra Ese podría haber sido yo. Esta será una opereta basada en los acontecimientos sucedidos en la primera década de los años 2000 en Filipinas.

Allí, alrededor de 12 personas fueron asesinadas en karaokes mientras interpretaban su versión de la canción My way, del mítico intérprete italoamericano Frank Sinatra. La obra explorará cómo la cultura del karaoke se entrelaza con la realidad económica, la concepción masculina postcolonial, y el entretenimiento como maniobra de escapismo predominante.

Esta será una pieza que invite a reflexionar sobre el papel de la fantasía en un contexto tan crudo como el mencionado.

La jornada del domingo

No conviene pasar por alto la actuación que realizará María Stadlober el domingo 17 a las 19.00 horas. La artista deleitará al público asistente con la pieza WILD 2.0, una réplica de la misma que cautivó a los allí presentes en la edición pasada del Scratxe Gaua, que tuvo lugar en el pasado mes de noviembre.

El precio a pagar para ver a los artistas del fin de semana será de 10 euros la anticipada y 12 euros las obtenidas en taquilla. Cabe mencionar que los espectáculos del sábado y domingo se pagarán por separado.

Detalles de la sala

La sala situada en el barrio de Aldabe contiene tres espacios principales. El primero de ellos en una sala grande llamada Kuia, de 90 metros cuadrados. El segundo espacio, más pequeño que el anterior y de nombre Kuiatxo, es un recinto que contiene 50 metros cuadrados. El tercero de ellos corresponde al hall, el equivalente a la entrada principal. Junto a los tres espacios mencionados, la sala también está dotada de vestuarios y de un almacén para atender su oferta cultural.