Chiara Ferragni y Fedez han confirmado lo que se llevaba durante un tiempo rumoreando: han puesto punto y final a su relación. Así lo ha confirmado este jueves el matrimonio, después de que la revista 'Vanity Fair Italia' asegurase que el pasado domingo el rapero dejara el domicilio donde convivían, al que no parece haber vuelto.

Desde la citada revista aseguran que el amor entre la modelo y el artista se había ido deteriorando a partir del Festival de San Remo del pasado año. El rotativo explica que la influencer había pospuesto la decisión de estar cerca de su marido enfermo. "Cuando se encontró en dificultades, Fedez la acusó de que sus problemas legales estaban teniendo efectos negativos en su negocio", apuntan.

"Un lance de recriminaciones en el que Fedez subió el tono del conflicto, todo ello mientras intentaba controlar la situación bajo control. El rapero huyó a Miami con su asistente y finalmente abandonó la casa", señalan desde 'Vanity Fair italia'.'

Otras pruebas que podrían explicar la ruptura serían las últimas publicaciones de Fedez en Instagram, las cuales parecen haber sido realizadas desde otro lugar que no es su casa en Milán. En cuanto a Ferragni, ha cambiado su foto de perfil con el rapero de la red social. Y en su biografía, en vez de la palabra 'esposa', aparecen 'madre y emprendedora'.

Mientras que 'Vanity Fair italia' considera que la relación entre ambos ya es inexistente, ninguno de los dos protagonistas se ha pronunciado al respecto. Es más, hasta el momento no han hecho declaraciones acerca de lo sucedido.

Objeto de polémicas

Cabe destacar que Chiara Ferragni protagonizó una sonada polémica el pasado mes de diciembre. Debido a varias prácticas comerciales desleales relacionadas con la venta del pastel de Navidad 'Balocco pandoro', la también influencer fue multada con más de un millón de euros.

Al mismo tiempo, la empresa antimonopolio de Italia (AGCM) aclaró que la publicidad del producto y los precios más elevados provocaron que los consumidores pensaran que, al comprar dicho pastel, estarían contribuyendo a una organización benéfica para la investigación del cáncer de huesos en un hospital de Turín. También creían que Ferragni estaba realizando donaciones.

Nada más lejos de la realidad, Balocco realizó un pago único de 50.000 euros al hospital antes del lanzamiento del 'Ferragni Pandoro'. Por lo tanto, las ventas del producto no repercutieron en los beneficios.

Con motivo de esta polémica, la imagen pública de la modelo italiana quedó muy dañada y le afectó tanto a nivel empresarial como legal. Es más, numerosas compañías decidieron restringir su contrato con ella.