«Lucha y nunca sobrevivirás... Corre y nunca escaparás...». Con estas frases se presentó en el año 2002 Ciudad de Dios, la película dirigida por el brasileño Fernando Meirelles que en su país fue un éxito más que rotundo y que fuera de sus fronteras recibió más que considerables alabanzas. Incluso se hizo un hueco importante en la ceremonia de los Premios Oscar logrando hasta cuatro nominaciones a mejor director, mejor guion adaptado, mejor fotografía y mejor montaje. No hubo estatuillas, pero sí reconocimiento a nivel internacional.

La película se basó en una historia real descrita por el también brasileño Paulo Lins, la guerra entre Zé Pequeño y Mané Galinha en una favela de Río de Janeiro llamada precisamente Ciudad de Dios.

Ahora, más de dos décadas después, llega a Max, en formato serie, la continuación de aquella aclamada película: Ciudad de Dios: La lucha sigue. También basada en la obra de Lins, sus seis episodios retoman la historia de sus personajes con el fotógrafo Buscapé como centro y punto de partida. Trata de atraer al público con un relato actualizado de la vida en la favela.

Transcurridos todos estos años, el público se reencuentra con personajes que, como la película original, trascendieron y conoce a otros nuevos. La narración se centra en los personajes tanto de forma individual como colectiva y en como necesitan continuar con sus vidas estando juntos para hacer frente a los nuevos desafíos.

Lucha en comunidad

Toda la trama de la serie se desarrolla a principios de la década de los 2000, “cuando la salida de prisión de un joven narcotraficante vuelve a poner a Ciudad de Dios en disputa. Los residentes se encuentran atrapados entre narcotraficantes, milicias y autoridades públicas, pero la necesidad de escapar de este círculo hace que la comunidad se una para enfrentarse al opresor”, resume la sinopsis oficial.

Ciudad de Dios: La lucha sigue incorpora fragmentos de la película original a modo de ‘flashbacks’ con los que reconstruir la memoria y los recuerdos de los protagonistas de la historia más de veinte años después.

Alexandre Rodriguez interpreta al fotógrafo Buscapé, nacido y criado en Ciudad de Dios que conoce bien los problemas de su comunidad y que ahora trabaja en Copacabana como fotoperiodista pero manteniendo hilos con la favela ya que su madre y su hija siguen viviendo allí.

Edson Oliveira es Barbantinho, amigo de Buscapé desde la infancia y una voz autorizada y considerada en la favela. Roberta Rodrigues interpreta a Berenice, líder de la Ciudad de Dios, a donde regresa tras huir años atrás.

Activistas, traficantes y policías completan el abanico de personajes de esta nueva serie.