No es una situación extraña para nadie. Después de un tiempo de uso intenso del teléfono móvil, este comience a dar señales avisando de que la memoria se ha llenado demasiado, de que ya caben pocas fotos más, que los vídeos son demasiados y que las canciones descargadas ocupan ya mucho espacio. La solución más sencilla se encuentra en la papelera, en comenzar a borrar y a eliminar archivos.

Pero es en este punto cuando se despierta el sentimental que todos llevamos dentro, la necesidad de conservar recuerdos almacenados que a pesar de no visitar en mucho tiempo nos resistimos a deshacernos de ellos. Es el momento del plan b, de pasar todo este material a nuestro ordenador personal si no queremos guardarlo en las diferentes versiones que hay de la famosa nube, como puede ser Google Drive por ejemplo, y que dicho sea de paso ha comenzado a limitar el almacenamiento gratuito.

Un ordenador personal y un móvil conectados a WhatsApp Freepik

Lo más normal para poder hacer el trasvase de archivos del móvil al ordenador es el clásico cable de conexión USB, con el que poder acceder al dispositivo móvil y copiar las fotos. Esto suele obligar a recorrer las diferentes carpetas hasta encontrar lo que se busca. Este esfuerzo merece la pena si se van a pasar grandes carpetas que ocupen mucho, pero para uno o dos archivos se puede usar un truco que tiene a WhatsApp como un puente y que reduce tiempo y esfuerzo.

Es algo tan sencillo como mandarse las fotos, los vídeos o los archivos deseados a través del servicio de mensajería a uno mismo. Para poder hacerlo basta con abrir la aplicación de mensajería en el móvil y también la versión web o la versión para escritorio de WhatsApp en el ordenador. La versión web de la aplicación de mensajería cuenta con algunas opciones para gestionar archivos adjuntos, y esta puede ser la clave para hacer un intercambio de archivos rápido y totalmente privado.

Autoenvíos

Hecho esto sólo queda chatear con uno mismo para ir enviando las imágenes seleccionadas para después guardarlas. Este autochateo se puede hacer de dos maneras. La primera es crear un grupo de chat con otra persona y que incluya a ambos y después que la otra persona se salga del grupo (o que el administrador lo eche) y quedaría un grupo unipersonal al que poder mandar lo que se quiera. Esta manera de hacerlo fue un atajo que los usuarios del servicio de mensajería de Meta ingeniaron para poder escribirse recordatorios a sí mismos.

La segunda manera la creo el propio WhatsApp en una de sus actualizaciones ofreciendo la posibilidad de mandarse mensaje a uno mismo. Para esto basta con buscarse con el nombre de la cuenta cada cual. Aparecerá con tu nombre y detrás entre paréntesis (tú). Todo lo que se mande ahí será recibido por el emisor.

En el WhatsApp abierto en el ordenador aparecerán los archivos, las fotos o los vídeos que se quieren guardar. A partir de aquí se procede como con cualquier otro documento, se descarga en el ordenador y se guarda en la carpeta o dispositivo externo que se desee.

Ojo a la calidad

Puede que a veces no importe, pero hay que tener en cuenta un punto importante, al enviar fotografías por WhatsApp, la aplicación comprimirá automáticamente las imágenes para mejorar la velocidad de trasmisión de los datos hará que la imagen recibida tenga algo menos de calidad que la original. Para evitarlo se puede pulsar el botón HD que aparece en la parte superior de la pantalla junto a otras opciones de edición, o bien enviando la fotografía como si fuera un archivo corriente y no una imagen.

Por cierto, tampoco hay que olvidar que esta vía es de doble dirección, que lo que va también puede volver, por lo que desde el ordenador también se pueden pasar por el mismo sistema archivos al móvil.