El Baskonia desperdició el pasado domingo una oportunidad de oro para entrar en puestos de play off de la ACB por primera vez esta temporada al caer derrotado en casa del Breogán, por lo que no le queda más remedio que seguir remando en busca de conseguir ese objetivo que tan cuesta arriba se le está haciendo durante todo el curso. Por ello y teniendo en cuenta su calendario en las nueve jornadas que restan de liga doméstica, conseguir un triunfo en casa este domingo a partir de las 17.00 horas contra el Girona debe ser una obligación para los alaveses, ya que se trata sobre el papel del duelo más asequible que tienen por delante.

Eso sí, ha quedado más que claro que en la Liga Endesa no hay ningún partido fácil para el Baskonia esta temporada, menos aún después de contar con menos de 48 horas de descanso desde el duelo contra el Asvel. Además, el Girona no es el mismo equipo de principio de temporada. Renació con la llegada de Moncho Fernández al banquillo y ha abandonado el farolillo rojo de la ACB para colocarse actualmente con nueve victorias, tres por encima del descenso que marca el Coviran Granada.

El club presidio por Marc Gasol ha ganado tres de sus últimos cuatro compromisos contra el Joventut en casa y contra el UCAM Murcia y el Leyma Coruña a domicilio, por lo que llega en buen momento de forma a la cita. Por si fuera poco, ya demostró en el choque de ida, de infausto recuerdo para los alaveses, que no tiene ningún miedo al Baskonia.

Ocurrió el pasado 12 de enero. Los hombres de Pablo Laso se jugaban su último cartucho para alcanzar la Copa del Rey, pero fueron arrollados de principio a fin por el Girona, que jugó con su rival como si de un juguete se tratara. Los locales se impusieron en todos los cuartos en Fontajau y la abultada derrota por 96-67 hizo muchísimo daño al Baskonia, inoperante tanto en ataque como en defensa pese a todo lo que había en juego.

Seguro que los vitorianos no han olvidado aquel correctivo y tienen ganas de devolver el golpe, pero para ello deberán corregir los errores que cometieron entonces y mostrar su mejor versión, algo que será más fácil jugando en casa, donde han llegado todas sus alegrías de los últimos meses.

Fichaje de Jarod Lucas

En el choque de la primera vuelta, la gran estrella del partido fue el pívot Juan Fernández, que completó la mejor actuación de su carrera en la ACB con 29 puntos y un 13/15 en tiros de dos. Por ello, será clave que los interiores azulgranas defiendan bien la pintura y obliguen al Girona a lanzar desde fuera, ya que es el equipo que menos triples anota por encuentro (8,5) de toda la competición y también el segundo con peor porcentaje de acierto con un pobre 31,4%.

Ese es el principal motivo por el que el club ha fichado recientemente al escolta norteamericano Jarod Lucas, un efectivo tirador que apunta a debutar ante el Baskonia y que suple en la plantilla a Nike Sibande, cuyo contrato ha sido rescindido para hacer hueco a la nueva incorporación. Los alaveses deberán estar pendientes de esa nueva incorporación y también del otro referente anotador del Girona junto a Juan Fernández como es el base Ike Iroegbu, con 12,3 puntos por encuentro.

Además, el interior con experiencia en la Euroliga Yves Pons, lesionado desde la séptima jornada liguera, regresó a la convocatoria el pasado fin de semana y, aunque finalmente no jugó, podría contar con minutos este domingo y elevar el tono físico del juego interior del Girona.

El Baskonia, por su parte, mantiene en la enfermería a Kamar Baldwin por su lesión en la mano. Ambos conjuntos pondrán toda la carne en el asador, con la presión claramente en el lado local, por lo que los visitantes jugarán más liberados.