Síguenos en redes sociales:

Dani DíezExjugador del Baskonia

Dani Díez: "En Vitoria y en el Baskonia es donde la afición más sabe de baloncesto"

El alero madrileño, que reconoce que le habría gustado seguir, se despide con palabras de cariño y agradecimiento del club tras finalizar su etapa de dos años

Dani Díez: "En Vitoria y en el Baskonia es donde la afición más sabe de baloncesto"Pilar Barco

Dani Díez (Madrid, 1993)ha puesto fin esta semana a su etapa en el Baskonia dos años después de su aterrizaje en Vitoria-Gasteiz. El alero madrileño aceptó desde el primer momento su rol secundario en el equipo y ejerció también como la voz de la experiencia en Euroliga y en ACB en una plantilla joven. Con momentos mejores y peores, Díez nunca ha protagonizado un mal gesto y no se ha dejado nada en el tintero cada vez que ha saltado a la cancha, motivo por el cual se ha ganado el cariño y el respeto de la afición baskonista. Horas después de anunciar su adiós, Díez atiende a DIARIO DE NOTICIAS DE ÁLAVA desde Estados Unidos y repasa lo que han dado de sí sus dos intensas temporadas en Vitoria.

¿Qué sintió al recibir la noticia de que no continuaría en el Baskonia?

Es verdad que estoy triste por dejar muchos amigos en el club, en el cuerpo técnico, jugadores, aficionados... Sobre todo el vínculo que he tenido con la afición creo que se ha notado mucho, les tengo un gran cariño. También estoy muy agradecido por haber tenido la oportunidad de volver a jugar en la Euroliga después de varios años sin hacerlo. Por desgracia, estas cosas pasan en el mundo profesional, te tienes que despedir y tienes que ir cambiando de equipos. Ojalá pasara menos y pudiera estar durante más tiempo en los sitios, pero el baloncesto es así y no queda otra que aceptarlo.

Dani Díez conduce el balón en un partido en el Buesa Arena

¿Ha habido en algún momento alguna opción de seguir?

No, no ha habido ninguna propuesta para continuar. Mentiría si dijera que no he sido feliz en Vitoria. Me he sentido muy querido por la afición, por los compañeros y por el staff, pero hemos tomado caminos separados. Ahora a donde voy a ir voy a ser más protagonista, voy a tener más minutos y otro tipo de rol, y eso es lo que me apasiona y me emociona en estos momentos. He disfrutado mucho del rol que he tenido en el Baskonia estos dos años, pero también me apetecía algo distinto. Aun así, no se ha dado ninguna conversación para renovar, esa es la realidad. 

¿Se confirma por lo tanto que jugará en el San Pablo Burgos la próxima temporada?

Lo único que puedo decir es que he firmado en un sitio en el que voy a ser feliz. Estoy muy ilusionado por estar allí y por ponerme a trabajar duro desde el principio.

“He dado el cien por cien cada vez que he salido a la cancha y eso la afición lo valora, de ahí el cariño”

¿Qué balance hace de sus dos temporadas en el Baskonia?

Yo creo que deportivamente los dos años han sido buenos. Hemos dado lo mejor que teníamos en cada momento a pesar de las lesiones y de no tener reemplazos después de estos percances que nos han dejado cojos en distintas posiciones. El equipo ha dado lo que ha podido. El primer año quedarse cerca del récord de victorias del Baskonia en liga regular y del primer puesto fue increíble, mientras que en el segundo entrar en el play off de la Euroliga con el presupuesto y las bajas que hemos tenido tiene un gran mérito.

¿Qué se podía haber mejorado?

Es verdad que hay cosas que hemos hecho muy mal como fallar en momentos clave el año pasado como la Copa del Rey o el play off de la ACB contra el Joventut. Eso es un fracaso, evidentemente, y este año deberíamos haber entrado en las eliminatorias de la ACB, pero creo que compaginar la Euroliga y la ACB con tan pocos jugadores es imposible. En cualquier caso, pienso que el equipo ha peleado y ha competido, que es lo que se le pide, y yo creo que lo hemos hecho muy bien.

Dani Díez celebra una acción de la pasada temporada en Euroliga

¿Le habría gustado contar con más protagonismo o ha tenido el rol que esperaba cuando llegó?

Cuando se me fichó, Joan Peñarroya se puso en contacto conmigo y no es que tuviera que convencerme, pero me gustó mucho la manera que tuvo de hablarme. Fue muy sincero conmigo y es verdad que tuve muchísimos minutos con él. No me esperaba tantos el primer año, pero como Daulton Hommes tenía la rodilla regular hubo muchos momentos de la temporada en los que no pudo jugar y eso me dio a mí mayor protagonismo y aproveché la oportunidad. Creo que me he ganado el cariño de la gente no sólo por el vínculo que he tenido con ellos y por lo que he podido hacer fuera de la pista, sino porque cuando jugaba lo hacía lo mejor posible y creo que eso lo han visto y lo han valorado. Por eso siento ese cariño también hacia la afición, es recíproco. El sentirme valorado estos últimos años tanto en Burgos como en el Baskonia ha hecho que me sienta mucho mejor conmigo mismo, estoy muy agradecido a ambos clubes y a sus aficiones.

¿Cómo describiría el Baskonia y Vitoria a quien no los conoce?

Bueno, yo creo que es el club y la ciudad donde la afición sabe más de baloncesto. Lo he palpado todos los días, en los viajes, en los partidos... Se notaba muchísimo que entienden un montón, que viven el baloncesto con pasión y nos han apoyado en las buenas y en las malas y eso queda para siempre. Los jugadores pasamos por muchos equipos, pero encontrarte aficiones así no es fácil. Yo sólo puedo decirles que he intentado dar mi cien por cien, creo que ellos lo han valorado y estoy muy contento de haber pertenecido al Baskonia dos años. Esos momentos en el Buesa, como en la primera temporada cuando no perdíamos casi nunca en casa o la celebración del billete para el play off de Euroliga en la segunda, no los voy a olvidar.

¿Se queda con algún momento en concreto?

Muchos, pero me quedo sobre todo con los amigos que he hecho. El haber conocido a Tadas Sedekerskis, a Vanja Marinkovic, personal del staff y demás es con lo que me quedo. Van a ser amigos para toda la vida. Me quedo con eso y con el cariño de la gente. Yo sé que cuando vuelva a Vitoria, espero que pronto, me van a recibir con los brazos abiertos. Lo he notado durante el día a día estos dos años y ahora con mi despedida en redes sociales. No se puede hacer a la idea de todos los mensajes que me han llegado, tanto públicos como por privado. Llevo mucho tiempo respondiendo y todavía no he podido responder a todos. El leer tantos mensajes positivos me emociona y también me reconforta porque es señal de que estoy haciendo las cosas bien. Merece la pena jugar a baloncesto a este nivel por esta clase de cosas que me están pasando, la verdad.

¿Cambiaría algo de su paso por el Baskonia? 

No, no me arrepiento de nada. He dado todo lo que tenía siempre, creo que eso la gente lo sabe. Me habría gustado que fueran más años para poder disfrutar más de la Euroliga y de esa afición y el tan buen baloncesto que hay en la ciudad. Eso para nosotros es lo más como jugadores, por eso vienen y seguirán viniendo al Baskonia profesionales muy buenos.

¿Cómo vislumbra el futuro del club con los movimientos que se están dando?

El Baskonia siempre ficha muy bien. Se las ingenian para encontrar jugadores que se puedan revalorizar y vender luego. Estoy seguro de que el curso que viene volverá a ser competitivo otra vez, pero no le puedo dar más ideas porque no sé a quién más se va a contratar ni el entrenador al que van a traer. Los que han fichado ya son muy buenos, así que seguro que hacen un equipazo.

¿Se ha sentido estos dos años como una de las voces del vestuario? Desde fuera daba esa sensación.

Yo no lo he buscado, pero por todos los años que he jugado al máximo nivel tanto en el Unicaja como en el Real Madrid tengo esa experiencia que me ha permitido en algunos momentos alzar un poco la voz y ayudar al resto. Yo he intentado instruir desde el ejemplo, llegando todos los días a trabajar de los primeros y marchándome de los últimos, dándolo todo. También yo he tenido la oportunidad de aprender de muy buenos jugadores y por eso valoraba y apreciaba tanto el poder jugar. Algunos se sorprenden de que animara tanto cuando no jugaba. ¿Cómo no lo iba a hacer con lo agradecido que estaba de poder jugar en ese club y que se me dieran 13 minutos por partido de media? Yo lo valoro. ¿Podría haber jugado más? Tal vez, pero me quedo con lo bueno, y son muchas cosas buenas.  

Marinkovic y Dani Díez, dos excelentes amigos, bromean con Howard tras una de las cuatro victorias logradas por el Baskonia ante el Real Madrid la pasada temporada

¿Qué jugador le ha sorprendido más estos dos años?

En cuanto a amistad, no digo nada nuevo, me quedo con Vanja y Tadas. Nikos también es una persona excepcional. Como jugador evidentemente Howard tiene un talento descomunal que es muy difícil de encontrar, y Darius Thompson hacía mejor a los demás. Parecía que iba con una marcha menos en algunos momentos, pero es que era muy superior al resto. Sedekerskis también se ha convertido en un jugador top de la Euroliga y se lo merece por todo lo que trabaja y lo mal que lo ha pasado, mientras que Marinkovic vino verde de Valencia y se va convertido en uno de los mejores escoltas de Europa en mi opinión.

“Es imposible compaginar Euroliga y ACB con tan pocos jugadores y sin reemplazos para los lesionados”

¿Qué me dice de los entrenadores?

Ha sido un placer trabajar tanto con Peñarroya como con Ivanovic, les estoy muy agradecido a los dos. Peñarroya me dio la oportunidad de jugar en el Baskonia, de no ser por él posiblemente no habría terminado aquí. Dusko, por su parte, llegó en un momento en el que el equipo estaba mal y yo estaba jugando menos por un par de lesiones que tuve a principio de temporada, pero me dio mucha confianza desde el minuto uno. He jugado con él y trabajar a sus órdenes ha sido una muy buena experiencia. Es un entrenador exigente, pero si tú le das trabajo y constancia, él te lo devuelve.

Dani Díez saluda a Matt Costello en la Plaza Amárica donde los jugadores pasaron los reconocimientos médicos del club

Con su salida el Baskonia se queda de nuevo sin jugadores españoles. ¿Qué opina de ello?

La normativa de los cupos de la ACB es la que es. Hay pocos cupos, muchos de ellos extranjeros y sólo hay alrededor de un 20% de jugadores españoles en la liga. Cada vez hay menos y los que son muy buenos se van a la NBA pronto o están en proyectos punteros de Europa. El Baskonia seguro que se recreará y encontrará a alguien para ocupar ese cuarto cupo con acierto.

¿Le gustaría terminar con un mensaje para los aficionados que le han escrito estas últimas horas?

Ya lo he dicho durante toda la entrevista, creo que les he mencionado mucho, aunque ellos ya lo saben. Me he sentido muy querido en el Baskonia, llegué y me recibieron con los brazos abiertos en la calle y en el pabellón a pesar de las dudas. Al principio me acuerdo que con la apendicitis me costó entrar en dinámica, pero ellos tuvieron paciencia y me animaron. Eso lo voy a recordar siempre. Me voy triste por dejar a esa afición tan buena, pero volveré seguro y Vitoria se va a convertir en una segunda casa para mí.