La etapa de Dani Díez en el Baskonia llega a su fin. Después de pertenecer a la disciplina azulgrana las dos últimas temporadas, el jugador de 31 años y el club separan sus caminos, según ha anunciado el conjunto azulgrana esta tarde de forma oficial.

Díez ha vestido en 117 partidos los colores baskonistas, 62 en Liga Endesa y 55 en la Euroliga. El club agradece en su comunicado "su profesionalidad y compromiso durante estos dos años" y le desea "la mejor de las suertes en su futuro personal y profesional".

El alero madrileño aterrizó en Vitoria-Gasteiz en el verano de 2022 tras registrar unos notables números en el San Pablo Burgos, especialmente desde la línea de tres puntos. Su fantástica muñeca ha sido también su principal arma durante las dos campañas en las que ha vestido de azulgrana, con porcentajes de acierto siempre alrededor del 40% y jornadas de mayor y menor protagonismo, pero en todo momento preparado para sumar durante los minutos que estaba en la cancha.

Cabe destacar también su aportación con su veteranía, experiencia en ambas competiciones y liderazgo dentro de un vestuario en el que desde su llegada ha sido una de las voces más escuchadas. En su última campaña como azulgrana promedió 2,8 puntos y 2,3 rebotes en 13 minutos de media en ACB y 2,4 puntos y 2,1 rebotes en 12 minutos en Euroliga, cifras que no le han servido para prolongar su estancia en la capital alavesa.

Con la confirmación de su marcha, un secreto a voces, el Baskonia se queda con únicamente tres jugadores de formación en su plantilla actual (Khalifa Diop, Raieste y Tadas Sedekerskis), por lo que deberá afrontar este verano de nuevo la difícil tarea de encontrar un jugador que ocupe ese cuarto cupo que exige la ACB para poder participar en sus competiciones.

También pierde una pieza versátil para su batería interior, ya que Díez ha jugado tanto en el puesto de tres como en el de cuatro. Con el futuro de Costello y Kotsar, que también terminan contrato, en el aire y Moneke levantando el interés de distintos equipos, Sedekerskis y Diop son los únicos interiores fijos de una plantilla que apunta a tener que afrontar una profunda reconstrucción de su juego interior en verano.