Primer partido de la temporada en el Buesa Arena. Todo salía a pedir de boca en el fortín azulgrana. La parroquia baskonista disfrutaba del espectáculo del 'Opening Game' y hacía otro tanto de lo mismo con el juego de su equipo que estaba desarbolando a un Unicaja incapaz de frenar el vendaval de juego azulgrana.

Remontada, juego eléctrico, jugadas de ensueño, triples estratosféricos y la posibilidad de ver a Markus Howard en estado puro. El compulsivo anotador azulgrana dio buenas muestras en la presentación ante su afición de lo que es capaz de hacer. En poco más de ocho minutos destrozó al cuadro costasoleño con su capacidad para perforar el aro desde la larga distancia. ¡15 puntos! con una escasa presencia de 8:27 segundos sobre la pista.

Sin embargo, la felicidad no fue plena por culpa de un inesperado susto en el inicio del tercer cuarto. Tras una canasta de Unicaja, Howard se disponía a subir el balón cuando un inoportuno resbalón por culpa de una de las pegatinas en la bombilla de los tiros libres le obligó a retirarse al banquillo. El jugador se había lastimado y dio la sensación de que ese sobreestiramiento le podría haber provocado alguna lesión. Silencio en la grada. El jugador ya no regresaría a la pista y habría que esperar para conocer si realmente sufría algún tipo de lesión de gravedad.

Finalmente todo quedó en un susto y el jugador ya pudo ser de la partida en el siguiente compromiso de la escuadra azulgrana dos días más tarde en el Palau ante el Barça. Eso sí, el debate sobre lo inoportuno de las pegatinas de publicidad en la cancha se volvió a reabrir ese día. De hecho, el propio vídeo de Youtube en el que se ve el resbalón de Howard cuenta con un comentario al respecto. "Está clarísimo que la publi de las bombillas son un peligro...pero como es una fuente buena de ingresos..pues seguirán los resbalones", aseguró hace algo más de un mes Gorka Amalurra.

"Está clarísimo que la publi de las bombillas son un peligro...pero cómo es una fuente buena de ingresos..pues seguirán los resbalones"

Ahora las críticas a esta forma de publicidad en la cancha han vuelto a reaparecer tras el resbalón sufrido por Victor Wembanyama en su debut con Francia ante la selección de Lituania durante un partido de las ventanas FIBA. Además, lo ha han hecho a través de una voz autorizada como la de un jugador de baloncesto de élite, en concreto el baskonista Daulton Hommes.

El jugador azulgrana, que el pasado domingo disputó tan solo unos minutos ante el Betis por unas molestias en la rodilla que también le impidieron viajar hasta Atenas para medirse el viernes al Panathinaikos, fue crítico con las pegatinas que hay sobre el parqué. El interior azulgrana se cuestionó a través de su cuenta de Twitter "¿Cuántas lesiones más o resbalones y caídas así hasta que eliminen definitivamente las pegatinas?"

Al igual que a Howard, el resbalón del talentoso pívot galo quedó en nada. Solo un susto. Sin embargo, los jugadores, a la postre los verdaderos protagonistas del juego, temen que algún día no sea así y por culpa de estas pegatinas puedan sufrir una lesión de gravedad. Hommes, que ahora mismo está lesionado, ha sido el último en quejarse por este riesgo que sufren en las canchas.