“Sinceramente, es muy difícil estar año tras año sin minutos de forma consistente”

¿Qué tal va la preparación, se le está haciendo larga?

De momento todo está yendo bien. Las pretemporadas siempre son exigentes, aunque yo llegué algo más tarde que mis compañeros por las ventanas FIBA con Letonia y estoy algo más fresco mentalmente.

¿Se hace tan dura con Peñarroya como con Ivanovic?

No, eso seguro que no (risas). Creo que después de vivir una pretemporada con Dusko va a ser imposible que tenga una preparación más dura en lo que me queda de carrera.

¿Cómo se está encontrando personalmente en este inicio?

La verdad es que muy bien. Llegué un poco antes que algunos de mis compañeros y al principio estábamos solo siete del primer equipo con varios jugadores jóvenes, por lo que me sentí con un rol más importante en el inicio y también he tenido un poco más de tiempo de conocer al entrenador. Ahora han llegado los demás y mi sensación es que vamos a tener un equipo muy unido y con buena química.

Con la marcha de Baldwin, Fontecchio o Peters hay menos nombres que la pasada temporada. ¿Cree que el objetivo es ser más un equipo como ha hecho España en el Eurobasket?

Sí, como se suele decir, el talento gana partidos, pero los campeonatos, a la larga, los gana el equipo y ese puede ser nuestro punto fuerte este año. Los nuevos compañeros son muy abiertos y han llegado teniendo claro a qué club vienen, con una misma idea y sobre todo con ganas, que es algo muy positivo.

La pretemporada está siendo un tanto irregular. Contra el UCAM el equipo estuvo muy mal, luego contra el Manresa cambió completamente... ¿Cómo lo explica?

Yo creo que son cosas de la pretemporada. El entrenador está probando distintos quintetos y sistemas. Obviamente siempre quieres ganar, pero en estos partidos lo que se busca es probar cosas. Contra el UCAM se notó que ellos llevan más tiempo juntos y son un equipo ya, nosotros estamos en ese proceso todavía.

¿Qué le está pareciendo por ahora Peñarroya como entrenador?.

Estoy contento con él, me gusta mucho su sistema y a todos los jugadores se les ve cómodos. Estamos conociendo nuestro rol en el equipo y se nota que, como dicen, confía más en los jóvenes. Nos va a dar oportunidades y tendremos que responder en la cancha.

¿Espera tener más protagonismo que la pasada temporada?

Todo dependerá del resultado que le demos, ojalá salga todo bien. Sé que oportunidades habrá, lo que tenemos que hacer es aprovecharlas.

¿Es ese su principal objetivo este año, tener más minutos?

No, el objetivo que yo me marco para esta temporada es ser mejor jugador. Sé que lo puedo hacer bien en defensa, pero tengo que dar ese paso adelante en ataque y aportar más en esa faceta, sin olvidarme obviamente de la defensa.

¿Lo pasó mal la temporada pasada cuando, después de haber tenido minutos con Ivanovic, apenas pudo participar con Spahija?

Sí, y creo que también ese fue el momento en el que entendí que si quería jugar más tenía que aportar más en ataque. Dusko y Neven son dos entrenadores totalmente diferentes, el primero le da más importancia a la defensa, a la lucha, y el segundo es más táctico, se centra más en el ataque. Me di cuenta de que si no reunía las dos cosas en mi juego no iba a jugar.

Aun y todo, en los minutos que tuvo se le aplaudió mucho en el Buesa. ¿Se sintió querido por la afición?

La verdad es que sí, yo sabía que podía aportar energía y carácter al equipo en ese momento y es muy bonito cuando se aprecia el esfuerzo que haces. Agradezco mucho el apoyo que me dieron.

Es uno de los jugadores que termina contrato el verano que viene. ¿Ha habido algún contacto con el club para renovar?

Todavía es pronto. Empezaremos la temporada y según el rendimiento que pueda dar yo y los resultados que dé el equipo supongo que en algún momento lo hablaremos.

¿Le gustaría seguir en el Baskonia?

Sí, claro. Me encanta esta ciudad y decir que es mi segunda casa se queda corto, es casi mi primera casa. Aquí he pasado la mayor parte de mi vida consciente, desde los 15 años, que es cuando ya comienzas a comprender mejor la vida. Aquí me siento como en mi hogar.

Si no consigue tener protagonismo, ¿se plantea dar un paso atrás y fichar por un club en el que poder ser más importante?

Esa sería mi segunda opción, sí. Si no puedo seguir en el Baskonia seguramente buscaría un equipo donde poder jugar más. Para cualquier jugador es importante mentalmente sentirse necesario en el equipo. Sinceramente, es muy complicado estar año tras año sin minutos de forma consistente, y la salud mental es fundamental para poder rendir al máximo.

¿Que sea su último año de contrato es una presión añadida?

No, la verdad es que ninguna. Sobretodo después de este verano, en el que he estado con jugadores de nivel Euroliga y NBA y me he sentido en muy buena forma, preparado para dar el siguiente paso. Mi objetivo es soltarme un poco más y poder hacer mi juego.

¿Qué aspectos de su juego se está centrando en mejorar?

Por un lado meter los tiros, porque siento que mis porcentajes son todavía como una montaña rusa, y por otro evitar los fallos y tomar las decisiones correctas. Es posible que este año me toque jugar de base y por eso tengo que limitar las pérdidas y mejorar la toma de decisiones.

En los últimos años le ha tocado jugar tanto de ‘uno’ como de ‘dos’. ¿Dónde se siente más cómodo?

Sinceramente, después de estar jugando como base en la selección me he sentido con confianza subiendo el balón. Estoy aprendiendo a tener un poco más de pausa en mi juego y a decidir mejor, por lo que me veo igual de cómodo en ambos puestos. Dependerá de lo que necesite el entrenador en cada momento y de las defensas que propongan los rivales. No he hablado con Peñarroya específicamente de esto, pero en los amistosos he jugado muchos minutos de uno, con Howard al lado, que es un gran anotador, y entiendo que tengo que estar preparado para las dos cosas.

Con el Eurobasket se han puesto de moda los hermanos Hernangómez. Ahora usted competirá también contra su hermano Rodions, que ha fichado por el Betis, ¿cómo lleva eso de ser rivales y a la vez compañeros de selección?

Bueno, son sentimientos encontrados. Por un lado, estoy contento porque lo tendré más cerca y jugaremos el uno contra el otro, pero por otro lado ha sido un pequeño paso hacia atrás para mi hermano en su carrera. Esperemos que le venga bien y pueda volver a competir al máximo nivel pronto.

¿Siente que lo han comparado mucho con él pese a ser dos jugadores diferentes?

Al principio sí, tal vez hasta los 18 años, parecía que todos esperaban que siguiera sus pasos. Luego maduras y entiendes que cada uno tiene su camino y no tiene sentido intentar repetirlo.

Cuando el club buscaba un jugador de formación, ¿intentó incidir para que consideraran a Rodions?

No, yo creo que ya lo tenían en el radar mucho antes de que yo dijera nada.

También se consideró a otro compañero suyo de selección como Rolands Smits. ¿Llegó a hablar con él sobre el Baskonia?

Sí, tuve una conversación con él antes de que firmara por el Zalgiris, pero para entonces ya tenía bastante decidido lo que iba a hacer, digamos que tuve la información un poco antes.

Ahora el club trabaja en el fichaje de un exterior. ¿Le preocupa que le pueda quitar minutos?

La pasada temporada, con Neven, le habría dicho que sí, pero viendo cómo van las cosas este año y la idea del entrenador de intentar jugar con toda la plantilla para que esté fresca no me preocupa tanto.

Si pudiera pedir un deseo para esta temporada, ¿cuál sería?

Volver a ver sonreír a la afición del Baskonia. Creo que la pasada temporada se quedaron un poco decepcionados y tal vez también con algunas de las salidas de este verano. Quiero que esta campaña se queden satisfechos desde el principio.

El club está preparando una fiesta para el partido inaugural contra Unicaja. ¿Espera un buen ambiente ese día?

Yo la verdad es que no conozco a Juan Magán ni a Ana Mena. En Letonia no son muy populares (risas), pero me han dicho que aquí son muy famosos, así que tendré que quedarme a verlos. Seguro que quienes vayan al partido se lo van a pasar muy bien.