- De la preocupación por tres derrotas consecutivas (Barcelona, Asvel y CSKA) a relativa tranquilidad por los contundentes triunfos, también consecutivos, sobre dos campeones de Europa como el Fenerbahce y el Pantahinaikos. Así es la competición, sobre todo una tan densa como la Euroliga. De abajo a arriba, y viceversa, en un suspiro, en apenas una semana.

El TD Systems Baskonia se codea ahora con el Top 8, el objetivo mínimo de este club cuando se confeccionan las plantillas. No alcanzar esa segunda fase de la Euroliga suele considerarse un fracaso en una entidad acostumbrada a tutearse con los mejores de la competición.

En estos momentos, la clasificación presenta tres equipos en cabeza con cierta distancia sobre el resto aunque con la consideración de que al Barcelona aún le queda por recuperar un partido, en su día aplazado por el coronavirus, ante el Olympiacos (se jugará el 8 de diciembre).

Después hay un grupo de siete equipos enlatados en uno o dos triunfos, a priori conformando la decena principal de candidatos a jugarse las ocho primeras posiciones. Bastante más rezagados se quedan algunos favoritos como el Armani Milan de Ettore Messina, el Maccabi, el Alba Berlín, el Panathinaikos y el Khimki. Ahora bien, esta clasificación sigue por ahora muy desvirtuada por la cantidad de partidos aplazados que todavía se deben recuperar, entre ellos dos del TD Systems Baskonia.

Los vitorianos recuperan el lunes uno de ellos (ante el Zenit en el Buesa Arena) y aún les faltará medirse al Alba Berlín (el 5 de enero) para ponerse al día con el calendario. No cabe por tanto elevar demasiado la euforia porque lo único conseguido hasta ahora es equilibrar el balance entre victorias y derrotas (4-4).

Otra cosa son las sensaciones y esas sí que han cambiado a mejor. Como comentaba Ivanovic tras el choque ante el Panathinaikos, "seguimos con algunos altibajos, aunque cada vez son menos".

En realidad, su fórmula es sencilla. "Si se defiende bien se depende menos del ataque". Y el Baskonia dejó en 68 puntos al Fenerbahce y en 72 al Panathinaikos. Simple.

Los otros triunfos cosechados por el equipo vitoriano a lo largo de esta Euroliga se produjeron ante el Real Madrid -los blancos se quedaron en 63 puntos- y contra el Khimki (60). La única vez en la que una buena defensa se tradujo en derrota fue con el Barcelona (71-72) tras un encuentro que no obstante estuvo dominado por el Baskonia hasta casi el final y que el propio Jasikevicius calificó de increíble. "No tengo ni idea de cómo hemos ganado este partido", confesó el técnico culé.

Las otras tres derrotas han tenido lugar cuando los equipos rivales han encontrado facilidades para perforar el aro baskonista. Estrella Roja (90 puntos), CSKA (89) y Asvel Villerbaune (88) -la única victoria del equipo francés- se regodearon ante un déficit defensivo de su rival vitoriano que ahora parece resuelto.

Otra cosa será mantener este frenético ritmo en el tiempo. El lunes ya hay otro partido. Y el jueves otro...

Las cuatro victorias sumadas hasta ahora por el Baskonia evidencian que la clave del éxito vitoriano se basa en la defensa