vitoria - El Baskonia recuperó el jueves ante el Armani (al menos durante algunas fases del encuentro) bastantes de las señas de identidad que había perdido en las últimas semanas y logró una victoria que se antojaba imprescindible para asegurarse un mínimo de tranquilidad en las seis jornadas que restan para la conclusión de la fase regular de la Euroliga. Este fin de semana, dispone de una oportunidad inmejorable para continuar explorando esa senda positiva. Y es que el siempre caprichoso calendario ha dibujado un 23º capítulo liguero muy propicio para que los de Sito Alonso puedan asaltar la cabeza.

Claro que para ello lo primero que tendrán que hacer es cumplir con su parte y deshacerse del Valencia el domingo por la tarde. El combinado taronja ha dado sobradas muestras de ser un adversario complicado para cualquiera pero lo cierto es que las circunstancias que rodean al encuentro parecen sonreír en este caso al cuadro alavés. Porque los levantinos se presentarán en el Buesa Arena muy mermados por las ausencias por lesión de Diot y Kravtsov y, además, castigados con dureza por la competición.

Los discípulos de Pedro Martínez comenzaron esta intensa semana venciendo el martes al Khimki del exbaskonista Dusko Ivanovic en el primer partido de la eliminatoria de cuartos de final de la Eurocup que están disputando. Un duelo que ayer mismo tuvo su segunda etapa, saldada en esta ocasión con derrota valenciano. Todo ello, además, acompañado de un siempre cansado desplazamiento de ida y vuelta a Moscú. El domingo rendirán visita al Buesa Arena pero resultará inevitable que en su cabeza esté muy presente el tercer y definitivo choque del cruce europeo que afrontarán el miércoles en La Fonteta.

El Baskonia, por su parte, únicamente ha disputado del jueves ante el Armani en el que se reencontró consigo mismo y puede encarar el choque liguero más fresco físicamente y con menos distracciones. Unas condiciones que se antojan de gran ayuda para tratar de conseguir una victoria que sería muy importante, porque permitiría a la escuadra alavesa sumar una más que su rival (16 por 15). Como consecuencia, ascendería al tercer puesto de la tabla aunque los taronja cuentan con un partido disputado menos. Como objetivo secuendario incluso podría plantearse recuperar el average particular entre ambos, para lo que debería imponerse por más de ocho puntos teniendo en cuenta el 99-91 que se registró en la contienda de la primera vuelta.

Pero esta 23ª jornada de Liga ACB no ofrece un único motivo para la esperanza azulgrana. Porque esta misma tarde tendrá lugar otro encuentro en el que, suceda lo que suceda, los de Sito Alonso saldrán clasificados. Porque los dos primeros clasificados en estos momentos, Tenerife y Real Madrid, miden sus fuerzas en la pista del combinado insular. El plantel canario lidera la tabla con un balance de 16 victorias y 5 derrotas por el 15/5 que hace ir segundo al grupo de Pablo Laso.

Así pues, un tropiezo merengue permitiría al Baskonia adelantar a los blancos en la clasificación mientras que en caso de ser el Tenerife el perdedor sería igualado por los alaveses. Todo ello, claro está, siempre que el conjunto azulgrana sea capaz de cumplir con su parte mañana y doblegar al Valencia en Zurbano. Una oportunidad inmejorable que no debe dejar escapar de ninguna manera.