Vitoria. La pretemporada del Laboral Kutxa no arranca oficialmente hasta el próximo 26 de agosto, pero algunos de sus integrantes quieren estar finos y en un dulce estado de forma antes de empezar a sudar de lo lindo a las órdenes de Sergio Scariolo. Lamont Hamilton, uno de los flamantes tres fichajes consumados hasta la fecha por Josean Querejeta, ha sido el primero en pisar suelo alavés al aterrizar ayer a primera hora de la mañana en Loiu tras un agotador vuelo transoceánico que le ha dejado alguna secuela física. El fornido neoyorquino ha acelerado su llegada para pasar los pertinentes reconocimientos médicos.
De 28 años y 29 años, Hamilton desembarca en el Fernando Buesa Arena con el aval de haber sido durante el pasado ejercicio uno de los pívots dominantes de la ACB enfundado con la camiseta del Bilbao Basket. Su notable rendimiento, especialmente en una estelar primera vuelta del torneo, y el hecho de que fuera a tener varias novias en este verano motivaron que el Baskonia cristalizara hace muchos meses las negociaciones para su llegada. Como hombre de negro, donde también dejó rastro de algunas preocupantes carencias defensivas, promedió 13,1 puntos y 5,6 rebotes para una valoración de 15. En tierras alavesas, ha suscrito un vínculo por dos campañas. "Estoy un poco enfermo, pero bien", confesó ayer a los medios del club nada más personarse en el recinto de Zurbano.
En un aparente buen estado y tras unas largas vacaciones en Nueva York en compañía de su familia, Hamilton detalló que su deseo es "ponerme a trabajar cuanto antes" para coger rápidamente la forma y ser una pieza útil desde los albores del curso. Como no podía ser de otra forma, su desembarco en un club de ambiciosas miras como el Baskonia, donde dispondrá de la oportunidad de disputar por primera vez la Euroliga, colma todas sus expectativas profesionales.
"Me siento bien. Hay un nuevo técnico, un par de nuevos fichajes... Empezaremos pronto y tengo ganas de trabajar ya. Siempre estoy motivado cuando inicio una nueva temporada, pero en esta ocasión mucho más por ser con otro equipo", recalcó un interior que debe proporcionar la fortaleza física de la que adoleció el conjunto vitoriano durante muchos tramos de la fatídica pasada temporada.
El próximo en llegar será Fabien Causeur, a quien el Baskonia pretende mimar en esta parte del año para comprobar la evolución de sus problemas de fascitis plantar con los que acabó la pasada campaña. Precisamente por ello, el galo renunció a tomar parte con su selección en el Europeo de Eslovenia.