Vitoria. Con sus detractores y sus partidarios, la decisión de Josean Querejeta que ha puesto punto y final a la segunda etapa baskonista del entrenador que más ha dado a este club, se consumará hoy sobre la pista del Zalgiris Arena a través del primer encuentro de Zan Tabak al frente de la plantilla azulgrana. El primero que no dirige Dusko Ivanovic desde tiempos inmemoriales para el veloz tránsito vital que se instala en el deporte de élite.

En manos del croata está variar el rumbo de una nave que iba a la deriva. Una nave que se ha distinguido, en la adversidad y también en los momentos prósperos, por unas señas identitarias marcadísimas. El equipo que nunca defendía en zona ya no será tal. Ésta es, posiblemente, la característica más definitoria del decálogo duskista, implantado a fuego en el plantel durante este largo periodo. Pero no la única. Más allá del propio encuentro, afición y prensa se mueren por desgranar la propuesta del legendario poste de la Jugoplastika. ¿Se cambiará libremente en defensa pese a la descompensación entre pares? ¿Habrá libertad en ataque o se encomendará el grueso de esta faceta a la estrategia? ¿Tendrán los jugadores unos roles más definidos? ¿Cobrará protagonismo alguno de los tres bases? ¿Se incidirá con mayor profusión en el juego interior?

En un encuentro trascendental para el devenir del equipo alavés en la competición continental, la mayoría mirará primero a estos factores pese al tenue rotulado que se le haya podido imprimir en dos días. Bocetos de la idea que pretende instaurar Tabak. El cambio, en tan corto espacio de tiempo y tras un periplo de esta longevidad, es lo que tiene. A partir de ahí, habrá que fijarse en un equipo que es modélico en este curso. Plaza ha logrado trasladar su impronta a una escuadra acostumbrada, hasta hace pocos meses, a vivir instalada en la conformidad. Nada que ver con lo que propone el técnico catalán, quién se guía por una ambición encomiable.

No conviene olvidar que el Baskonia se enfrenta al equipo con mayor anotación (86,8 puntos por encuentro) y valoración (95,5) a lo largo de estos seis partidos de Euroliga y con la baja de Nemanja Bjelica. El mejor según la estadística, vamos, con permiso del invicto Barcelona. En un pabellón que asiduamente reúne a unos 15.000 seguidores y contra un Zalgiris que, herido, tras su derrota ante el Cedevita, buscará afianzarse en la primera posición del grupo.

En un plantel de aportación coral, destacan las de Darjus Lavrinovic, Marko Popovic o Ibrahim Jabber, sin olvidar a otros como Tremell Darden, Oliver Lafayette, Paulius Jankunas o Rimantas Kaukenas.

Todo un reto para iniciar esta andadura que, ójala, sea larga y fructífera para ambas partes. La compuesta por Tabak y la que forma el baskonismo al completo. Arranca la vida en común de ambos cónyuges. Que sea por mucho tiempo.