vitoria. Dejan Musli abandonará el Caja Laboral la próxima semana en busca de un nuevo destino en el que contar con minutos de juego. Fichado en verano como apuesta de futuro, el club vitoriano ultima con el agente del jugador serbio la cesión del pívot de 19 años a otro equipo hasta final de temporada. Aunque el todavía pupilo de Dusko Ivanovic cuenta con propuestas de escuadras de diferentes países, la decisión definitiva se tomará la semana que viene. Aunque ayer algunas páginas web se hicieron eco de un posible interés del AEK de Atenas, el club griego no ha trasladado éste supuesto deseo a ninguna de las partes.

Mientras tanto, Musli continúa ejercitándose bajo las órdenes del entrenador montenegrino. Su deseo era permanecer en la capital alavesa, pero la falta de confianza de su técnico y la intención de que se foguee en un nuevo hogar le han llevado a asimilar su cesión, siempre con el final de esta campaña como única posibilidad. En principio, ni el Baskonia ni el propio pívot contemplan ahora mismo una cesión que vaya más allá de este verano. Inexorablemente, el destino de Dejan Musli será un equipo extranjero. Desde la entidad azulgrana explicaron en su momento que la reglamentación de la ACB les impedía ceder al jugador nacido en Prizren a otro club español. El hecho de que éste tuviera un contrato garantizado con el Caja Laboral hasta final de esta temporada no permite su paso a otro equipo estatal, aunque sí a cualquier otro plantel extranjero.

Todo como consecuencia de los problemas legales que subyacen entre la Unión Europea y el país natal de Musli. Según explicó ayer a este periódico el agente del jugador, el tratado laboral entre ambos países -en suspensión- es el motivo por el que el joven balcánico no puede pasar a formar parte de otro equipo de la ACB, como también evita -al igual que ocurre con los jugadores no europeos- que se pueda ejercer sobre él el recurrente derecho de tanteo.

Así las cosas, aunque Dejan Musli actúa como jugador europeo por derecho propio y goza de la mayor parte de beneficios propios de su condición, esa parte de la normativa le ha perjudicado en esta ocasión a la hora de poder continuar su carrera en la competición doméstica al menos hasta el verano. La próxima semana, el mejor amigo de Nemanja Bjelica en la plantilla azulgrana -con el que comparte la mayor parte de su tiempo libre, con permiso de la esposa del alero- partirá definitivamente a otro equipo en busca de los minutos que no ha tenido en el Buesa Arena.