Vitoria. Ambicioso y con ganas de recuperar algo de su prestigio perdido en los últimos tiempos. Así se mostró ayer Marcus Haislip, el flamante fichaje del Baskonia para reforzar su debilitada zona. Poco después de la puesta de largo del equipo ante sus aficionados, el ala-pívot estadounidense ofreció sus primeras impresiones como nuevo integrante azulgrana en las que, en parte motivado por su negra estadística ante su actual club cuando militaba en el Unicaja, destiló hambre de éxito por todos sus poros.
"Fichar por el Caja Laboral supone una gran situación para mí. He firmado por un magnífico club, un equipo ganador y a mi me gusta ganar partidos y campeonatos. Nunca les pude derrotar mientras estuve en Málaga. Quiero ser una pieza más y ayudar en todo", admitió sin ambages el hombre que ocupará la plaza que, en principio, estaba destinada a Mensah-Bonsu hasta su descarte por los problemas crónicos de sus dos rodillas.
Tras una primera intentona fallida debido a las diferencias económicas entre ambas partes, la entidad del Buesa Arena reactivó su llegada el pasado miércoles hasta producirse la fumata blanca. "Es cierto que las conversaciones han sido largas, pero al final estoy aquí y me encuentro preparado para ganar partidos. Vengo aquí para tener éxitos y estaré decepcionado si no conquistamos algún título", insistió Haislip, un prototipo de baloncestista fibroso y atlético del que el club ha carecido en los últimos tiempos.
Tras seis meses sin disputar ningún partido oficial y una aciaga última temporada en la que fracasó tanto en los Spurs como en el Panathinaikos, en la que una lesión de rodilla precipitó la rescisión de su contrato, Haislip dejó claro que "estoy bastante bien físicamente" y vaticinó que ofrecerá un rendimiento acorde a las altas expectativas. "Es cierto que llevo tiempo sin jugar, pero he estado trabajando por mi cuenta todo el verano y haciendo ejercicios. Me encuentro en buena forma", confesó un Haislip conocedor de la disciplina espartana de su nuevo técnico. "Debo mentalizarme a mí mismo, pero estaré preparado para responder". Por último, se definió como "un jugador atlético, activo, al que le gusta correr y moverme por todos los lugares".
Bjelica, esperanzado El alero serbio, la apuesta más ambiciosa de Josean Querejeta durante el verano y cuyo fichaje para las próximas cinco temporadas estuvo repleto de dificultades por la férrea oposición del Olympiacos, confió por su parte en proporcionar grandes noches de gloria a la parroquia azulgrana. "Me hallo preparado para soportar la presión. Será mi primer año realmente serio, ya que participaré en la Euroliga y en la mejor competición de Europa como la ACB. Sin embargo, estoy listo", destacó una prometedora pieza llamada a seguir en el futuro la estela de Nocioni, Calderón, Scola y Splitter por su futuro ingreso en la NBA.
Antes de ello y una vez complete todos los pasos necesarios para su formación, Bjelica deberá consagrarse en primera instancia en el Viejo Continente y refrendar las altísimas expectativas que el baskonismo tiene depositadas en él. "Quizá mi adaptación sea difícil. Será mi primer año fuera de mi país y tengo que estar preparado para todo, tanto si me convierto en un jugador importante como si ocurre lo contrario", advirtió.
Como evidenció en el reciente Mundial de Turquía, donde dejó destellos de su enorme calidad en el duelo de cuartos de final ante España, su polivalencia le permite actuar en los tres puestos exteriores y como falso cuatro. "No sé lo que puedo aportar. Realmente lo que el equipo necesite de mí. Me gusta jugar al baloncesto. Puedo hacerlo en varias posiciones, pero dependerá del entrenador. Lo que me pida, lo haré", significó.
La presencia de su compatriota Dusko Ivanovic en el banquillo es un inmejorable aval para, a su juicio, "progresar como jugador", madurar y convertirse a corto-medio plazo en una estrella de la canasta, como barruntan los entendidos. "He escuchado cosas de él y soy consciente de que quiere que todo el mundo trabaje duro. Es por eso por lo que elegí el Baskonia, porque quiero entrenar duro. Estoy muy contento por formar parte de este club", subrayó. Tras completar ayer su primera sesión de trabajo, el duelo ante el Gran Canaria supondrá esta noche la primera oportunidad para embrujar a un público que tiene visos de idolatrarle.