El final del estado de alarma y la buena temperatura que reinó este sábado por la noche en Vitoria llevaron a decenas de jóvenes a congregarse en plena Virgen Blanca para celebrar el fin del toque de queda y algunas restricciones.

Aunque no se produjeron incidentes, el momento culmen de la noche llegó cuando la música empezó a sonar en plena plaza y los jóvenes allí presentes se animaron a bailar como si de una fiesta al aire libre se tratara.

La Virgen Blanca de madrugada

La Virgen Blanca de madrugada

Las celebraciones, sin embargo, no se circunscribieron al centro de la capital alavesa. En Zabalgana y Salburua algunos vecinos lanzaron cohetes y petardos para, como si de Nochevieja se tratara, recibir con ruido y estruendo el fin del estado de alarma. Incluso algunos coches que circulaban por las calles de noche hicieron sonar sus bocinas.

De este modo, y al igual que en otros puntos de Euskadi, las celebraciones se adueñaron ayer de Vitoria en una cálida noche que ejerció de preámbulo al primer día sin estado de alarma.

La Ertzaintza y las diferentes policías locales tuvieron que intervenir puntualmente para disolver algunas aglomeraciones en diferentes puntos del País Vasco por grupos que bebían alcohol en la calle, pero sin que se hayan registrado incidentes importantes. El departamento de Seguridad ya avisó ayer de que se iban a realizar controles policiales para evitar disturbios.