El colectivo Lumagorri ZAT ha presentado este viernes varias aportaciones al proyecto presupuestario del gobierno municipal de Gasteiz para "revertir el camino de recortes" que el borrador plantea en las políticas LGTBI para este nuevo año.

Según los cálculos de la asociación, éstos son de casi el 70% en las partidas destinadas a la Agenda para la diversidad sexual y de género y al Observatorio contra la LGTBI+fobia (Ikusgune), que de recibir 150.000 euros en las Cuentas de 2020 han pasado a tener una dotación de sólo 50.000 en el proyecto de 2021.

La propuesta de Lumagorri, en concreto, solicita igualar tanto estas partidas como la asignada a la Escuela para el Empoderamiento feminista a las de los presupuestos del pasado 2020 y, en algunos casos, mejorarlas. Es el caso, por ejemplo, de Ikusgune, para el que el colectivo pide incrementar su convenio hasta los 75.000 euros, 5.000 más que en las Cuentas de 2020. El proyecto presupuestario del ejecutivo municipal reduce esta partida hasta los 30.000.

Local de Ikusgune

Además, Lumagorri propone recuperar la asignación destinada al acondicionamiento del local definitivo del Observatorio, que en las Cuentas de 2020 fue de 20.000 euros y en el borrador de 2021 se queda a cero.

"Es necesario dotar de recursos humanos y económicos suficientes al servicio de Igualdad del Ayuntamiento de Vitoria-Gasteiz. Este es un servicio a proteger de los recortes, más si cabe en el contexto de una crisis sanitaria, económica y de cuidados, por lo que consideramos que todas las partidas económicas destinadas a este servicio deberían contemplar, en todo caso, una subida y nunca un recorte", ha apuntado Lumagorri a través de una nota.

Cabe recordar que la aprobación de los presupuestos del Ayuntamiento necesita de al menos un voto favorable más en el Pleno, porque el gobierno municipal (PNV y PSE) suma 13 de sus 27 ediles.

Más delitos de odio

El colectivo ha puesto también el foco en el reciente incremento de los delitos y discursos de odio, que "preocupa a diferentes instituciones", a lo que hay que sumar "la situación de crisis sanitaria derivada de la pandemia". A juicio de Lumagorri, esto "ahonda más, si cabe, en la situación de precariedad de los colectivos más vulnerables, como es el LGTBI+".

La última encuesta de la Agencia Europea de Derechos Fundamentales (FRA), publicada el pasado mayo, pone de manifiesto, entre otras cosas, que desde el año 2012 apenas ha habido progresos en Europa en este ámbito. De hecho, el 43% de las personas encuestadas afirmó haberse sentido discriminada por su orientación sexual, según ha recordado la asociación.