El mercado de invierno avanza sin grandes sorpresas entre los rivales directos del Deportivo Alavés. Al igual que para el club albiazul, no se espera una ventana demasiado agitada para el resto de equipos de la zona baja y muestra de ello es la calma que reina en estos momentos. Esto último, como siempre, es consecuencia de la poca flexibilidad que ofrece el límite salarial. Las revoluciones de enero pasaron a mejor vida hace tiempo.
Estableciendo el límite en la 14ª posición, quienes más se han movido hasta ahora han sido el Espanyol (18º) y el Valencia (20º), dos de los tres que ocupan el descenso con uno y cuatro puntos menos que el Glorioso (17º), respectivamente.
Ambos han cerrado un par de llegadas y sin pagar traspaso en ninguno de los casos. El de Umar Sadiq, cedido por la Real Sociedad, es el nombre más llamativo, dispuesto a reencontrarse en Mestalla. Max Aarons es el otro che y Pablo Ramón y Roberto Fernández los periquitos.
Entremedias, está el Alavés. Facundo Garcés, cuyo fichaje se cerró hace meses, es el único refuerzo que han hecho oficial los babazorros y, para abrir de nuevo la puerta, tendrán que dar salidas. Una que podría hacerse muy pronto es la de Luka Romero. El argentino, propiedad del Milan, apenas ha jugado durante la primera vuelta y tiene ya un acuerdo con Cruz Azul para poner rumbo a México una vez rompa su cesión en Vitoria.
Por otro lado, Las Palmas (14º), Getafe (15º), Leganés (16º) y Real Valladolid (19º) continúan sin novedades, al menos en el apartado de entradas. Así se espera que siga en el caso de los canarios, contentos con el rumbo del equipo desde que Diego Martínez tomó las riendas. Pero no en el cuadro azulón y el pepinero. Más difícil, eso sí, lo van a tener los de José Bordalás, pues su límite salarial está superado ya desde verano.
La incógnita es el Pucela. Necesita sí o sí refuerzos para comprar papeletas de cara a la permanencia, pero está inmerso en una crisis institucional. La afición no quiere que Ronaldo Nazario se mantenga al frente y el brasileño parece dispuesto a vender el club, aunque no a cualquier precio. También se teme la salida de un futbolista decisivo: Raúl Moro. El catalán ya ha sido tentado por el Ajax y la Atalanta para irse en enero.
LIMITADOS POR LOS CAMBIOS EN LOS BANQUILLOS
Es reseñable, respecto al tema económico, que a cuatro de los seis clubes citados, entre los que se incluye el Alavés, les lastra el haber prescindido de su entrenador con la temporada ya iniciada. Luis Miguel Carrión (Las Palmas) fue el primero en caer y luego les tocó a Paulo Pezzolano (Valladolid), Luis García Plaza y Rubén Baraja (Valencia), siendo reemplazados por Diego Martínez, Diego Cocca, Eduardo Coudet y Carlos Corberán.