Aprovechando su visita a los nuevos campos de fútbol del BAKH, Kike García compareció ante los medios de comunicación allí presentes para valorar, entre otras cosas, la polémica surgida por su expulsión frente al Real Valladolid. Un castigo que, cabe decir, no fue justificado -o no al menos de manera sustancial- por Melero López, colegiado principal de la contienda que enfrentó al Deportivo Alavés con los pucelanos el pasado viernes en Mendizorroza.

No le dije nada, y así se vio al no ponerlo en el acta. Yo, simplemente, me acerqué a él para explicarle que no era falta y me encontré con la doble amarilla. Creo que no hay que tener la piel tan fina, menos en un momento tan tenso, cuando solo faltaba un minuto para el final. Sé cuál es el límite y no lo sobrepasé”, explicó el delantero manchego, quien se perderá, como consecuencia, la visita del conjunto babazorro a Vallecas el sábado (16.15 horas).

La expulsión, cabe decir, fue especialmente amarga por lo ocurrido minutos antes, cuando Kike se reencontró con el gol en Mendizorroza. “Estaba con ganas de marcar en casa y lograrlo hizo que lo de después doliera más, sí. Son cosas en las que no me veo reflejadas y tuve que darle luego explicaciones a mis hijos”, admitió. Además, él sabe que a otros no se les castiga de tal manera por acciones peores. “Es lo que hay, pero mente positiva”, agregó. 

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En imágenes: la inauguración de la Escuela de Fútbol del Deportivo Alavés en el BAKH desata pasiones Alex Larretxi

Por otro lado, el manchego manifestó que ha visto al vestuario “con muchas ganas” en los últimos días, dispuesto a poner fin lo antes posible a la mala racha por la que pasa el Alavés, que ha sufrido cuatro derrotas consecutivas. “Nos está costando y queremos darle la vuelta. Sabemos las cosas que estamos haciendo mal y no queda otra que seguir trabajando. El sábado tenemos otra oportunidad para revertir la mala dinámica”, agregó.

¡KIKEGOL, KIKEGOL!

Antes de ofrecer sus declaraciones, Kike García había participado muy activamente en la sesión vespertina de la Escuela de Fútbol del Deportivo Alavés, que sirvió como pistoletazo de salida oficial al curso. “Me encanta venir a actividades como esta y pasar tiempo con los niños y las niñas. Lo hago con muchas ganas. Al final, yo me veo también un poco reflejado en ellos, en cómo fueron mis primeros pasos en este deporte”, apuntó.

El manchego se puso bajo los palos y, durante cerca de 45 minutos, se dedicó a parar los disparos de los jóvenes albiazules. Se le notó, encima, muy implicado, casi con la intención de mandar un mensaje a Antonio Sivera. “Me gusta meterme en el papel (ríe). Tengo dos hijos y disfruto mucho cuando juego con ellos”, dijo. Añadió, asimismo, que ve futuro en la cantera, solo que hay que “trabajarlo”, tal y como “está haciendo” el club.

Esa pasión, seguramente, fue la que le hizo ganarse el cariño del centenar, entre niños y niñas, allí presente. Al término de la sesión hubo una foto grupal y, mientras se iban colocando para la misma, todos corearon su nombre: “¡KikeGol, KikeGol, KikeGol!”. Algo a lo que él, un poco vergonzoso, no pudo hacer otra cosa que responder con una sonrisa y varias instantáneas más. El carisma del obrero es incomparable, eso quedó claro. 

MÁS PROTAGONISTAS

Ahora bien, Kike no fue el único protagonista del Alavés masculino en la visita al BAKH. Carlos Martín le acompañó, además de Luis García Plaza, y también hizo balance de lo acontecido en los últimos días: “Estamos bien, con buenas sensaciones durante la semana y con ganas de cambiar la situación. Sabemos que Vallecas es un campo complicado, donde aprietan mucho, pero estoy seguro de que, con nuestras armas, haremos un buen partido”.

Al preguntarle sobre la actuación arbitral contra el Valladolid, el atacante madrileño prefirió no hacer valoraciones y sí destacar la importancia de que el Glorioso se centre en lo que puede controlar, con la idea de “ir mejorando” su propia imagen. Reconoció, finalmente, que está “trabajando” para que el míster le dé oportunidades y que la visita al sur de Madrid es "especial" para él, pues en las gradas podrá ver a su familia y amigos.

"DEBEMOS TENER CABEZA"

Además de Kike García y Carlos Martín, también tuvieron oportunidad de valorar cómo va la temporada Itziar Gastearena y Laura Navajas, jugadoras del Alavés Gloriosas. Ambas, como es lógico, se mostraron más que satisfechas por la trayectoria del equipo, que es líder de la Primera Federación pese a haber jugado un partido menos, pero incidieron también en la importancia de no relajarse. “Está siendo una campaña ilusionante y queremos seguir en la misma línea, a ver hasta dónde llegamos. Ahora bien, esto acaba de empezar y debemos tener cabeza, yendo a tope y mejorando cada día”, manifestó Navajas. Gaste, por su parte, destacó en la misma línea lo “competitiva” que es la categoría, impidiéndoles relajarse, y que las nuevas, como ella, han dado “un plus” al buen trabajo que se realizó el ejercicio anterior. El próximo compromiso de las Gloriosas será dentro de una semana y media, visitando al que, actualmente, es su gran rival directo: el Alhama.