La nómina de delanteros del Deportivo Alavés para la temporada 2024-25 está completa. A la esperada continuidad de Kike García y la compra de Asier Villalibre se sumó ayer Carlos Martín, quien llega cedido procedente del Atlético de Madrid, y ahora es tarea de Luis García Plaza aprovechar las diferentes cualidades que tiene cada uno. Si se ha acertado o no lo dirá el tiempo, pero variedad, eso sí, no va a echar en falta el técnico babazorro.
Uno de los principales retos que tendrá Luis García con sus tres 'nueves' será acertar con el reparto de minutos, para evitar así lo que ocurrió la campaña pasada con Jon Karrikaburu. Siendo el dibujo 4-2-3-1 inamovible, es común que una de las tres variantes tenga menor protagonismo, pues no hay sitio para todos, y eso es lo que le ocurrió al ariete de la Real Sociedad, cuyo periplo en Mendizorroza fue breve –hasta enero– y baladí.
La gran diferencia entre Karrika y Carlos Martín, que ha sido el último en llegar, es que este segundo puede actuar en diferentes posiciones y no solo como delantero centro, por lo que, incluso si Kike y Villalibre están a buen nivel –como ocurrió con el propio futbolista manchego y Samu Omorodion hace un año–, el entrenador alavesista no se verá obligado a descartar al colchonero o a cambiar su sistema para encontrarle sitio sobre el césped.
En la línea de lo anterior, tampoco es comparable el momento futbolístico en el que llegó el navarro al Alavés con el del madrileño ahora. Martín viene de brillar en Segunda División, donde marcó 15 dianas con el Mirandés el ejercicio pasado, y ha sido también uno de los futbolistas más destacados en la pretemporada del Atlético. Tanto es así que, hasta el fichaje de Julián Álvarez, el Cholo Simeone apostaba por mantenerlo en su plantilla.
Además, es de ese tipo de delanteros que van más allá del gol, como tanto le gusta a Luis García. Hace jugar al equipo, ya sea combinando o buscando el sitio ideal en el que los compañeros puedan encontrarle desmarcado; y demuestra mucha hambre y confianza, pues ha elegido Vitoria-Gasteiz por delante no solo de otras opciones de mayor calado deportivo, sino también en las que la competencia por el puesto no iba a ser a priori tan exigente.
KIKE, EL ELEGIDO PARA EL ESTRENO
Obviando por un momento la posibilidad, como se ha mencionado, de que juegue en otra posición, Martín se va a encontrar a su llegada a Mendizorroza con un Kike que, ahora mismo, es titular indiscutible, sobre todo después de estrenar su casillero en Vigo. El de Motilla del Palancar, con su lucha y dominio del área, encaja a la perfección en la idea de Luis García y el mero hecho de llevar ya un año entero en el Glorioso juega mucho a su favor.
Ahí, en la punta del ataque, también quiere hacerse un sitio Villalibre, si bien todavía le queda camino por recorrer para tener opciones de sacar del once a Kike. Más allá de que ocasiones tan claras como la de Balaídos no debería fallarlas, lo que más puede lastrar al Búfalo en estas primeras semanas de Liga es que aún se le ve falto de ritmo competitivo. Algo, eso sí, bastante lógico considerando su escasa participación el ejercicio pasado.
De todas formas, que la competencia por una posición tan importante como la de 'nueve' sea exigente solo puede traer cosas positivas al Alavés, siempre y cuando la gestión del vestuario sea buena, tal y como lo ha sido desde que Luis García tomó las riendas. Entre futbolistas competitivos y que anteponen los intereses del colectivo, que uno apriete obliga al resto a dar más cada día, ya sea para mantener su puesto o arrebatárselo al que ya lo tiene.
IGUALAR O SUPERAR LOS ONCE GOLES
Uno de los retos de los tres, tanto de Kike García como de Asier Villalibre y Carlos Martín, será mejorar o, como mínimo, igualar los números goleadores de la delantera de la temporada pasada. Si bien los ocho tantos de Samu le vinieron genial al equipo, el casillero registró un total de once –el manchego marcó tres–, que pueden ser insuficientes si las demás líneas no aportan también en este sentido. Las ocasiones para ello no serán un problema.
Ahora bien, en esa tarea van a tener la ayuda de Stoichkov, a quien, en realidad, también se le podría considerar competencia para la posición de 'nueve', pues ya sabe lo que es actuar ahí. Aunque, en principio, parte como mediapunta, el gaditano es un futbolista no solo con mucha llegada, sino también acierto. 46 dianas, ni más ni menos, brindó al Eibar en sus tres campañas en Ipurua antes de firmar por el Alavés este verano.
