Las victorias frente al Atlético de Madrid y el Celta de Vigo –ambas en Mendizorroza– han dejado al Deportivo Alavés a un paso de certificar la permanencia en Primera División.
Su éxito puede ser matemático esta misma jornada y, para ello, los babazorros necesitan sumar el domingo en Mestalla mínimo un punto más de los que consiga el Cádiz en la víspera, cuando le tocará verse las caras con el Real Madrid en el Santiago Bernabéu.
No es menos cierto, en la línea de lo anterior, que una derrota de los gaditanos en el feudo blanco ya sería muy determinante para los intereses albiazules, aunque no definitiva.
En ese caso, incluso con un batacazo en casa del Valencia, el Glorioso tendría no solo que perder sus cuatro partidos restantes –y que los amarillos ganasen los suyos–, sino también ver remontada su diferencia de goles general, en la que tiene una ventaja de 16 tantos.
Todo lo anterior lleva a pensar que la permanencia puede ser efectiva muy pronto, y eso dejaría al Alavés en un escenario igual de inesperado, pues agosto lo lógico era pensar que se sufriría hasta el final, que de tranquilizador.
Pocas veces se ha visto al club gasteiztarra no jugarse nada durante un mes de mayo en la élite –más allá del orgullo y la posición, que sí importa para el presupuesto– y solo hay que echar la vista atrás para comprobarlo.
Su anterior permanencia en la máxima categoría, por ejemplo, fue matemática en la penúltima jornada. A las órdenes de Javi Calleja, reemplazo de Abelardo Fernández –y este de Pablo Machín–, los albiazules revirtieron su mala dinámica del curso 2020-21 y, con cuatro victorias, tres empates y una derrota en ocho encuentros, lograron salvarse frente al Granada (4-2) en Mendizorroza. Huesca, Real Valladolid y Eibar descendieron entonces.
Una temporada antes (2019-20), el desenlace fue idéntico, aunque dos meses más tarde debido al parón por el covid-19. De nuevo en la penúltima fecha, Juan Ramón López Muñiz cerró la continuidad del Alavés en Primera en el Benito Villamarín, ganando al Real Betis y después de empatar con el Getafe en casa.
El técnico asturiano sustituyó a un Asier Garitano que había sumado seis derrotas y un triunfo en la reanudación del campeonato.
De la anterior etapa en la élite, que duró seis campañas, el ejercicio con la permanencia matemática más temprana fue el 2016-17.
A las órdenes de Mauricio Pellegrino, los babazorros acabaron el curso a 24 puntos del descenso, limitado por el Sporting de Gijón, y cerraron su continuidad en la máxima categoría en la 32ª jornada, tras vencer en Mendizorroza al Villarreal, que peleaba por entrar en Champions League.
La de ese Alavés es, asimismo, la salvación en Primera más prematura de toda la historia albiazul, centenaria desde 2021. Ni siquiera el mítico Mané, en sus dos años clasificando al club para la UEFA, certificó tan pronto este objetivo, si bien, por entonces, la tabla estaba mucho más igualada.
Buena muestra de ello es que, cuando los gasteiztarras quedaron sextos (99-00) –salvándose en la jornada 34–, el Betis descendió con 42 puntos.
Por tanto, si el Glorioso cierra la permanencia en Mestalla, Luis García Plaza igualará aquel gran curso del técnico de Balmaseda y también el de Abelardo (2017-18), colocándose en tercera posición de este ranking.
La de Pellegrino, ahora buscando la épica con el Cádiz, seguirá en lo más alto del podio; la 2000-01 hará lo propio en segunda posición (j. 33); y detrás quedan la 2001-02 y la 2018-19, cuando el objetivo se consiguió en la fecha 35.
OPORTUNIDAD PARA EL BANQUILLO
Certificar la salvación, por otro lado, no solo implicaría afrontar el epílogo con mayor tranquilidad. Pese a que, como se ha mencionado, la posición final es importante de cara a futuros presupuestos, lo habitual cuando clubes como el Alavés logran su propósito suele ser que los futbolistas menos habituales tengan más minutos, como puede ser el caso de Jesús Owono, Ianis Hagi, Xeber Alkain y Abde Rebbach.
Tampoco puede descartarse, claro está, que Luis García dé oportunidades a algún canterano (Unai Ropero, Selu Diallo, etc.), sobre todo ahora que el Miniglorias no se juega nada y va a terminar su ejercicio. Además del Valencia, al Glorioso le resta medirse con el Girona (C), Real Madrid (F), Getafe (C) y Las Palmas (F).
