El Sevilla está inmerso en un cambio de ciclo tras el adiós de Monchi y el regreso de Víctor Orta a la dirección deportiva del club. El conjunto hispalense, que rozó recientemente el título en la Supercopa de Europa ante el todopoderoso Manchester City, trata de acometer una profunda reestructuración en su plantilla tras un verano agitado donde las llamadas no han cesado en el teléfono del director deportivo madrileño. Eso sí, la sombra de Monchi es alargada, ya que sumó 11 títulos durante sus dos etapas como arquitecto de los fichajes del Sevilla.

Monchi fue el capitán general del Sevilla durante dos etapas. Su buen ojo propició la llegada de futbolistas como Kanouté, Luis Fabiano, Dani Alves, Rakitic, Kounde o Ben Yedder, que supusieron una exitosa inversión para el conjunto de Nervión. Kounde, por ejemplo, llegó al Sevilla por un montante cercano a los 20 millones de euros y puso rumbo al Barcelona por 50 millones. Sin embargo, los éxitos del director deportivo se enturbiaron tras una última temporada protagonizada por sus salidas de tono y la mala conducta mostrada con Isco, uno de sus últimos fichajes, que lo acusó tras su salida de haberlo cogido del cuello tras una discusión.

Víctor Orta Europa Press Sports

Una renovación compleja

El volcánico mercado estival, eso sí, no mira al pasado, sino que se encuentra en constante ebullición. La entrada de Arabia Saudí en el escenario futbolístico ha propiciado el éxodo de futbolistas con nivel suficiente para el fútbol europeo. Yassine Bounou ha sido el último futbolista en abandonar el feudo de Nervión. El guardameta marroquí, pieza clave en los últimos éxitos del Sevilla, deja en las arcas del conjunto andaluz un montante económico de 21 millones de euros, pero también un vacío en una portería que actualmente solo la ocupa Dmitrovic. Esta venta sitúa a Bono, que compartirá vestuario en el Al-Hilal con Neymar, como el guardameta más caro de la liga árabe y, también, como uno de los 15 mayores traspasos del equipo del Sánchez-Pizjuán.

El Sevilla ha rubricado la llegada de tres futbolistas durante el mercado estival y espera acometer más fichajes siempre y cuando se despejen las vacantes en el vestuario. Estos son Adrià Pedrosa, libre procedente del Espanyol, Loic Badé, por quien se ejecutó la opción de compra de 12 millones al Rennes, y Djibril Sow, el mediocentro por el que se desembolsaron 10 millones al Eintracht de Frankfurt. Sin embargo, la carpeta de salidas es la que está generando más quebraderos de cabeza a Víctor Orta.

Entre los nombres que se encuentran en la rampa de salida está el de Óscar Rodríguez, al que se le ha vinculado al Deportivo Alavés desde hace semanas. No obstante, el centrocampista de Talavera de la Reina no es el único que puede abandonar el Sevilla durante el mes de agosto. Marcos Acuña es otro jugador que ha recibido la tentadora llamada de la Premier League. Precisamente del Aston Villa, club donde actualmente Monchi realiza las labores del director deportivo y que ha ofrecido un traspaso que no se acerca a las pretensiones hispalenses. Rafa Mir, por su parte, anhela regresar al Valencia, donde se convertiría en el líder indiscutible del entramado ofensivo de Rubén Baraja.

Tras dejar atrás la final de la Supercopa de Europa, el equipo dirigido por Mendilibar pone sus focos en el campeonato doméstico, que comenzó de mala manera tras la derrota en casa ante el Valencia. Todo ello sucede al mismo tiempo en el que Víctor Orta, teléfono en mano, trata de confeccionar un bloque competitivo con el que se pueda competir en todas las competiciones.

El director deportivo madrileño, eso sí, está curtido en la gestión de fichajes y salidas. Fue el arquitecto del Leeds de Marcelo Bielsa, que logró el ascenso a la Premier League y que dispuso de futbolistas como Raphinha o Kalvin Phillips, el pivote del Manchester City. Víctor Orta comenzó su andadura en los despachos en el 2005 en el Valladolid. Durante el 2006 y 2013 fue el secretario técnico del Sevilla y, después, hizo las maletas hacia el Zenit de San Petersburgo. Tras un curso en tierras rusas, Orta estuvo durante un año en el Elche y emigró hacia Inglaterra, siendo el director deportivo del Middlesbrough y, después, del Leeds United.

La inestabilidad del mercado de fichajes habita con las primeras jornadas del campeonato doméstico. Al igual que varios entrenadores, Mendilibar mostró su incredulidad hacia las incongruencias del calendario, puesto que su equipo todavía puede presentar modificaciones hasta el 1 de septiembre. “No sabes lo que puede pasar. Qué llegará o qué se marchará. Es una pena. No entiendo como está montado así, pero es lo que hay y punto”, explicó en la comparecencia de prensa tras el choque ante el Manchester City.

El duelo ante el Sevilla, en el que el Glorioso y el conjunto de Mendilibar perseguirán su primera victoria del curso, también será el punto de encuentro entre las direcciones deportivas de ambas escuadras. Con el nombre de Óscar Rodríguez en la agenda del club vitoriano, todavía no existe un acuerdo que brinde al equipo de Luis García la llegada del perfil de un futbolista diferencial en el balón parado y en el último tercio del campo