Rubén Campinún, bajista de En Tol Sarmiento, tiene una cita con todos los gasteiztarras el próximo 4 de agosto en la Plaza de los Fueros, donde, junto a sus compañeros de grupo, espera ofrecer una gran noche en el inicio de las Fiestas de la Blanca. Algo que seguro será muy especial, como todos sus conciertos, pero que puede serlo aún más si en él puede volver a celebrar el ascenso de su equipo, el Deportivo Alavés, a Primera División.

Como muchos otros aficionados babazorros, Rubén ha seguido al Glorioso en las diferentes categorías del fútbol español y, “con todo lo que  se ha sufrido”, temporadas como la actual, en la que se pelea por un ascenso, le hacen disfrutar al máximo. “Hay que valorar el camino. Se consiga o no el objetivo, deberíamos estar orgullosos por haber estado todo el año ahí arriba y el gran ambiente que se ha generado en Gasteiz y Mendizorroza”, añade. 

Ahora bien, esto último no quita que lo ocurrido en Las Palmas haya sido un varapalo. “Ha dolido, eso es evidente. Ascender en el Gran Canaria hubiera sido la guinda al trabajo de todo el curso, pero la Segunda División es muy difícil”, comenta. De todas formas, este músico alavés considera que no haber logrado una de las dos primeras plazas ha sido cuestión de “más detalles”, no solo de lo ocurrido en la recta final del campeonato. 

Le doy un notable alto a la temporada. El Alavés ha sabido trabajar muy bien los partidos y  ha convertido Mendi en un fortín. Solo ha faltado rascar algún punto más fuera de casa”, valora. Es por ello que, en el play off, Rubén espera que el equipo siga en la misma línea que le ha llevado hasta aquí, aunque, eso sí,  con “más fortuna” de cara a portería. “Va a ser clave mantener la fortaleza defensiva, los goles terminarán llegando”, complementa.

Rubén Campinún, de ETS, durante su charla con DNA. Jorge Muñoz

Al preguntarle concretamente por la eliminatoria ante el Eibar, Rubén admite que, entre las posibilidades que había, el cuadro armero le parece el rival menos desfavorable: “El que menos quería era el Albacete, pues llega con menos presión y puede dar la sorpresa. Tampoco el Levante se nos ha dado bien este año. Pese a que estará muy igualado, soy bastante optimista en este derbi, sobre todo, al jugar la vuelta en nuestro feudo”. 

No obstante, este seguidor babazorro no se fía, ni mucho menos, de la racha de los azulgranas en las últimas jornadas. Para él, el play off es “diferente” y los pupilos de Gaizka Garitano van a estar “motivadísimos”, por lo que el Glorioso “deberá mostrar su mejor versión”. Esa que, sin ir más lejos, pudo verse en la visita del propio cuadro guipuzcoano al Paseo de Cervantes hace unos meses, cuando los goles de Villalibre dictaron sentencia. 

TOCAR EN MENDIZORROZA

Además de vivir un nuevo ascenso de su equipo, Rubén Campinún también espera que el Alavés le dé algún día la oportunidad que tuvo hace no mucho en Anoeta, donde ETS fue telonero del choque entre la Real Sociedad y el Real Madrid. “Fue una noche muy guay, pero Mendi es especial para mí. Sería emotivo tocar sobre el césped albiazul igual que hicimos en el txuri-urdin. En especial, si es para celebrar un logro importante”, explica.

Cabe recordar, en este sentido, que tanto Rubén como sus compañeros ya formaron parte de una de las citas más importantes del Glorioso. Este grupo alavés, surgido en Yécora, fue la banda sonora de la final de Copa de 2017, en la que la escuadra gasteiztarra se enfrentó al FC Barcelona en el extinto Vicente Calderón. La previa de aquel día no habría sido tan especial sin sus canciones y los miles de alavesistas que les dieron color.