- A lo largo de la presente temporada, el Deportivo Alavés ha disputado muchos partidos que, previamente, habían sido catalogados como finales. Sin embargo, pese a que todos ellos fueron, sin duda, relevantes para determinar en qué posición llegarían los babazorros a esta recta final del curso, ninguno llegó a ser tan importante y, probablemente, decisivo como el que se jugará esta tarde, a las 19.00 horas, en el estadio de Son Moix.

Allí, ante la atenta y nerviosa mirada del público bermellón, el Mallorca y el conjunto albiazul se verán las caras en un duelo a muerte. No tanto en el caso de los locales, quienes, incluso con una derrota, seguirían metidos de lleno en la pelea por la permanencia, pero sí para el Glorioso, que necesita dar urgentemente un golpe sobre la mesa y, de esta manera, acortar el colchón de cuatro puntos que albergan baleares.

Para ello, va a ser fundamental que el Alavés ofrezca durante los 90 minutos la versión que mostró en la segunda mitad de su contienda frente al Rayo Vallecano. Ante los madrileños, los pupilos de Julio Velázquez fueron muy inferiores en la primera parte, pero, tras el paso por los vestuarios, dieron un paso adelante y solo entonces lograron intimidar a los hombres de Andoni Iraola. Algo que, aunque sirviera para sumar los tres puntos, no debería repetirse en el feudo mallorquín.

Respecto a la convocatoria, el técnico salmantino no tendrá que echar de menos a ninguno de sus futbolistas habituales. Salvo Javi López, la plantilla al completo está disponible para la expedición a las islas -incluido Pere Pons, ya recuperado-; y, además, solo Ximo y Escalante están apercibidos de sanción. Ambos, eso sí, dos bajas muy sensibles de cara al choque ante el Villarreal (30 de abril, 19.00 horas) en el caso de que vieran esta jornada su quinta amarilla.

En consecuencia, lo lógico sería ver un once casi idéntico al que formó contra la escuadra rayista. La única duda, en este sentido, se encuentra en la punta de ataque, donde, en El Sadar, estuvo Manu Vallejo y, frente a los madrileños, jugó Edgar. Ninguno de los dos cumplió con las expectativas y de ahí que el acompañante de Joselu continúe siendo una incógnita a estas alturas, aunque, ahora bien, todo apunta a que el tinerfeño volverá a la banda derecha después de que Jason no convenciera en esa posición.

Asimismo, el Mallorca tiene en su mano la oportunidad de, por un lado, tomar algo de oxígeno y, por el otro, de casi sentenciar a un rival directo. Con Javier Aguirre a los mandos, los bermellones han sumado una victoria (Atlético) y dos derrotas (Getafe y Elche) y afrontan la visita del Alavés como la vara definitiva para medir la reacción del equipo tras el cambio de entrenador. Sobre todo, teniendo en cuenta que el Cádiz y Levante también están al acecho de su posible pinchazo.

En lo referente a la lista de los locales, el propio técnico mexicano confirmó ayer las ausencias del carrilero Jaume Costa y el atacante Amath Ndiaye, dos hombres importantes a los que seguro le hubiera gustado recuperar, pero que deberán ver el duelo desde la grada por diferentes molestias. Quien, por el contrario, sí vestirá la zamarra barralet de inicio, pese a no estar al cien por cien, es el central Antonio Raíllo.

Por último, si se echa un vistazo al historial de enfrentamientos en el territorio balear, lo cierto es que este es bastante negativo para los intereses babazorros. En concreto, el Glorioso ha visitado al Mallorca en 17 ocasiones, teniendo en cuenta tanto los partidos en Son Moix como en el Lluís Sitjar, y únicamente ha conseguido llevarse una victoria -además de 12 derrotas y cuatro empates-.

Dicho triunfo se consiguió el 4 de mayo de 1975, cuando ambos equipos jugaban en Segunda División, y el resultado final fue de 0-1 gracias a un gol de José Luis Munárriz. Por aquel entonces, el entrenador del Alavés, que tuvo que disputar la promoción de permanencia, era el salmantino, al igual que Velázquez, Tito Reyes.