- Su ausencia ha sido sin duda una de las notas destacadas de la pretemporada albiazul pero, afortunadamente, Manu García trasladó ayer un mensaje esperanzador respecto a su futuro a corto plazo. Y es que el capitán del Glorioso desveló que afronta ya la recta final de la recuperación de un edema óseo que arrastra desde las últimas jornadas de la pasada temporada y que le impidió rendir a su nivel y poder ayudar a sus compañeros como le hubiera gustado en ese agónico epílogo del curso.
El vitoriano, que trabaja todavía al margen del equipo, señaló que, como informó este periódico la pasada semana, le tocó pasar por el quirófano para hacerse unas infiltraciones -la primera tuvo lugar al día siguiente de bajar el telón liguero y la siguiente el 4 de agosto- que ayudasen a solucionar esta lesión, pero celebró que está “cerca” de recuperarse y poder entrenarse con el resto del grupo.
“Estoy con muchas ganas y con mucha ilusión para afrontar esta temporada”, añadió el buque insignia del club babazorro que no se quiere perder el centenario del equipo de su ciudad en la máxima categoría.
“Nos está tocando vivir una parte del fútbol diferente que por responsabilidad con el club y nuestra afición tenemos que afrontar de la mejor manera posible”, manifestó Manu García, que deseó poder volver a disfrutar de un Mendizorroza lleno cuanto antes. “Ojalá podamos celebrar juntos este año tan especial para el equipo”, concluyó.
La del vitoriano no fue la única ausencia en la jornada de trabajo programada en la mañana de ayer en Ibaia por Pablo Machín. Tampoco participaron Adrián Marín ni John Guidetti. En el caso del delantero sueco, se encontraba de viaje de regreso tras estar presente con su selección en los dos encuentros disputados ante Francia y Portugal, saldados ambos con derrotas. En el primero saltó al césped en el minuto 77 y frente al conjunto luso no participó.