Vitoria. El quebradero de cabeza que se asentaba cual espada de Damocles sobre la cabeza de la dirección deportiva alavesista quedó ayer definitivamente archivado en el cajón del olvido y el guardameta Urtzi Iturrioz ocupará una de las seis plazas que en la categoría se destinan a los menores de 23 años al conseguir la entidad del Paseo de Cervantes que la reglamentación anterior, que extendía a los 25 años el tope de edad para que un portero pasase a ocupar ficha senior, siga vigente de cara a la próxima temporada al haber sido informado demasiado tarde de las variaciones aplicadas en el artículo 226 del nuevo reglamento de competición. El Deportivo Alavés, y otros cinco clubes más, recibieron el beneplácito del juez único de Segunda División B para inscribir con licencia sub'25 a uno de sus guardametas de cara a la temporada 2012-13 gracias a una moratoria temporal -hasta el pasado 30 de julio- en la entrada en vigor de la modificación del artículo 226 del reglamento general de la Federación Española de Fútbol.
La aprobación de dicha variación en el sistema que durante las últimas temporadas había regido la composición de las plantillas de los equipos de Segunda B se aprobó el pasado mes de mayo, pero no fue oficialmente notificada por la Federación a los clubes hasta el pasado 14 de julio -fecha en la que entró en vigor el cambio reglamentario-, cuando muchos de ellos ya habían acometido la contratación de guardametas que, como en el caso de Iturrioz (24 años), cumplían con la normativa anterior que les permitía no ocupar una ficha senior al estar por debajo de los 25 años. En esa tardanza a la hora de recibir el cambio de reglamentación ha basado el Alavés su reclamación, compensada ahora con una moratoria temporal que le permitirá evadirse del cumplimiento del nuevo reglamento hasta el próximo 1 de julio de 2013, por lo que el cancerbero alavés podrá seguir militando en la disciplina albiazul sin que ello suponga quebranto alguno.
Y es que la resolución del juez único de Segunda B ha supuesto un importante alivio para un Alavés que se había quedado sin margen de maniobra y que tendría que haber afrontado una dolorosa reestructuración en el caso de no haber visto aceptada su demanda de recibir una moratoria. Sin licencias senior disponibles y con la intención de mantener a todos sus futbolistas de campo mayores de 23 años, se habría visto obligado a prescindir de uno de sus dos guardametas -conflicto mediante- y a afrontar la llegada de otro joven cancerbero que cumpliese con los parámetros federativos. La solución permite inscribir al portero de Izarra como uno de los jóvenes de la plantilla, condición que en estos momentos comparte con Asier Barahona y con el recién llegado Sergio Ayala.
otros implicados Hasta una veintena de clubes se encontraban en una situación similar a la vivida por el Alavés con el caso de las licencias sub'25 para los porteros, pero solo cinco de ellos se han visto beneficiados por la misma moratoria temporal que les permitirá inscribirlos de cara a la temporada que está a punto de comenzar sin tener que hacer uso de una de las dieciséis licencias senior que se permiten en Segunda B.
Cádiz (Ángel Bernabé), Cartagena (Víctor Ibáñez), La Roda (Efrén Fernández), Lucena (Jesús Coca) y UCAM Murcia (Fernando Martínez), todos ellos integrantes del Grupo IV, se han visto beneficiados por la moratoria en la entrada en vigor del cambio en el artículo 226 del reglamento federativo al haber tramitado las licencias antes de haber entrado en vigor la nueva normativa. En cambio, muchos clubes que se encontraban en una situación similar pero que realizaron fichajes una vez conocido el cambio en la reglamentación no se verán beneficiados por la moratoria y tendrán que adecuarse a las nuevas normas federativas.