Vitoria. Los problemas de liquidez que han afectado al Deportivo Alavés en el tramo final de la temporada pueden tener una íntima relación con lo sucedido sobre los terrenos de juego. Y es que aunque otros factores también han contribuido a la falta de cash en las arcas albiazules, sin duda alguna uno de los que más peso ha tenido ha sido el rendimiento deportivo del equipo. Porque el nefasto epílogo de campeonato protagonizado por la escuadra de Mendizorroza y su no clasificación para los play off de ascenso ha costado más de 200.000 euros a las necesitadas cuentas alavesistas. Un dinero que, sin duda, hubiera venido de perlas para poder pagar las nóminas sin retrasos a los trabajadores y futbolistas.
Esta es una cantidad aproximada que habría variado en función del recorrido que hubiera protagonizado el equipo de José Carlos Granero en la fase de ascenso pero que estaba recogida en las cuentas que presentó el consejo de administración en la junta de accionistas. En concreto, dentro del presupuesto para la temporada 2011-12 y bajo el epígrafe ingresos por competición, aparecía la cifra de 255.000 euros.
La denominación genérica del concepto provoca que no estuviera destinada únicamente a los ingresos del play off, pero lo cierto es que esta era su fuente principal. Porque las taquillas habituales en los encuentros de Liga regular -considerando que el dinero de los socios está contabilizado en otro apartado y que no se han establecido a lo largo del campeonato días del club- son prácticamente insignificantes. Al margen de la fase de ascenso, el dinero también podría haber llegado proveniente de la Copa del Rey pero como quiera que el equipo tampoco logró disputar ni tan siquiera un encuentro del torneo del K.O. en Mendizorroza, este contador se quedó igualmente a cero.
Por lo tanto, la única posibilidad para cumplir lo presupuestado en este capítulo de ingresos era haber logrado el pasaporte para la fase de ascenso, objetivo que no cumplió el Deportivo Alavés a diferencia de los sucedido la pasada temporada.
Entonces, con Miguel Ángel Álvarez Tomé en el banquillo y la familia Ruiz de Gauna al frente, El Glorioso disputó las dos primeras eliminatorias del play off. Como consecuencia de ello, pudo ingresar en sus necesitadas arcas la nada despreciable cifra de 278.575 euros, aunque en sus presupuestos había realizado una estimación de 380.000.