Vitoria. Con un empate rescatado ya en el tiempo de descuento gracias a un gol de Javi Rubio, la Gimnástica de Torrelavega cerraba en Vitoria su transitar por una primera vuelta notable para el conjunto cántabro. Con 29 puntos en el casillero y en la novena posición -a un solo punto del quinto puesto que ya por entonces ocupaba el Alavés-, el cuadro de José Gómez se volvía a reafirmar como un equipo rocoso y difícil de superar, como los últimos años, y llamado a acabar entre la zona de privilegio en la clasificación final de este grupo.

Por desgracia para los intereses gimnásticos, el cambio de vuelta propició también un enorme bajón en los resultados de un equipo que se ha metido en unos problemas completamente inesperados. Tan graves, que con los dieciséis puntos cosechados en este segundo tramo de la competición ha caído hasta el puesto de play off de permanencia, una posición que los cántabros intentarán evitar en esta última jornada para no tener que pasar por un trance dramático en el que se jugaría a dos partidos la permanencia en la categoría. Y vista la trayectoria del equipo en esta segunda vuelta, la permanencia estaría bastante complicada fuera cual fuera el rival.

Con el arranque de la segunda vuelta coincidió el regreso de la Gimnástica al hogar del que había permanecido exiliada durante temporada y media. La conclusión de las obras de remodelación del estadio El Malecón propició el regreso a casa tras año y medio en un campo como el de Santa Ana de Tanos en el que jugar al fútbol era prácticamente un milagro. Triste retorno, no obstante, ya que los de José Gómez han sufrido unos enormes problemas como locales, que unidos a su bajón como visitantes, que les mantuvo arriba en la primera vuelta, han propiciado un sufrimiento completamente inesperado. Tras dos buenas campañas en la categoría de bronce, la amenaza de la Tercera División se cierne de nuevo sobre los gimnásticos por culpa de una seguda vuelta desastrosa.