vitoria. Miguel Ángel Álvarez Tomé se encontró ayer con un contratiempo inesperado de cara al compromiso del próximo sábado frente a la Cultural Leonesa. Y es que el preparador albiazul deberá ingeniárselas para encontrar la fórmula que le permita cubrir con un mínimo de garantías el agujero que se ha generado en el centro del campo. Durante la sesión preparatoria desarrollada a puerta cerrada en las instalaciones de Ibaia, Josete Malagón tuvo la desgracia de resentirse del esguince de tobillo que le ha mantenido en el dique seco durante las últimas jornadas y su presencia sobre el césped este fin de semana está prácticamente descartada. Como quiera que Ander Alaña tampoco podrá jugar después de ser castigado con un encuentro de sanción por el Juez Único de Competición tras cumplir el ciclo de amonestaciones, que Jules Pardo permanece de baja como consecuencia de la rotura del ligamento lateral interno que padece y que Carlos Indiano tiene bastante complicado recuperarse a tiempo de los problemas musculares que sufre, el panorama que se presenta es ciertamente preocupante.

Porque El Glorioso deberá afrontar este importante compromiso sin un pivote defensivo puro al que poder recurrir. Una carencia que sin duda producirá más de un quebradero de cabeza a Tomé. Sin embargo, no se trata de una situación inédita. Precisamente hace dos jornadas, cuando el Lemona visitó Mendizorroza, el preparador leonés ya tuvo que hacer frente a un escenario muy similar. En aquella oportunidad, optó por alinear un equipo distribuido en un 4-4-2 clásico estando integrado el centro del campo por Javi Casares y Calderón en las bandas y un doble pivote compuesto por Indiano y Fernando Esparza.

Una solución que se antoja complicado que vuelva a repetirse frente a la Cultural Leonesa. Para comenzar, el menudo centrocampista madrileño tiene muy complicado poder recuperarse a tiempo de sus problemas musculares. Por otro lado, la figura de Ibon Gutiérrez aparece como la alternativa más sólida en estos momentos para acceder a la titularidad. Junto a él, el capitán Asier Salcedo también podría hacerse con un hueco en detrimento de Esparza.

Sesión exigente En cualquier caso, habrá que esperar definitivamente hasta el propio sábado para saber por qué alternativa se decanta Miguel Ángel Álvarez Tomé. El preparador leonés sometió en la jornada de ayer a su plantilla a una intensísima sesión de trabajo que se prolongó por espacio de más de tres horas y durante la misma se dedicó a probar varias de estas alternativas para los problemas que padece en el centro del campo.

Y es que la visita de la Cultural Leonesa a Mendizorroza, último encuentro del año en el estadio del Paseo de Cervantes, se presenta como una ocasión ideal para dar un golpe sobre la mesa y volver a instalarse en lo más alto de la clasificación en solitario. Porque los adversarios directos de la escuadra alavesista en la pelea por las primeras posiciones deben hacer frente a compromisos a priori sensiblemente más complicados que podrían hacerles perder varios puntos por el camino.