vitoria. Después de un par de semanas de cierta tranquilidad en los despachos, la secretaría técnica albiazul considera que ha llegado el momento de volver a apretar el acelerador en las gestiones para configurar la plantilla de la próxima temporada. Se abre de este modo una segunda fase de máxima actividad que, si se cumplen los objetivos previstos por la entidad del Paseo de Cervantes, debe concluir con cerca del 90% de la plantilla cerrada cuando se inicie el trabajo de pretemporada el próximo 12 de julio.

La incorporación de Asier Salcedo -confirmada oficialmente ayer pero apalabrada desde hace mucho- supone el colofón a una primera etapa en la que se han concretado las llegadas de Jito, Javi Casas, Jon Moya, Fernando Esparza y el propio centrocampista vitoriano y la renovación de Óscar Rico. A partir de estos momentos, la secretaría técnica albiazul agilizará las gestiones para dar los últimos retoques que faltan al proyecto que liderará Miguel Ángel Álvaraz Tomé desde el banquillo.

El principal objetivo de esta etapa serán los jugadores sub" 23 que -hasta un máximo de seis- obliga la reglamentación vigente a incluir en la plantilla. Por el momento, únicamente el portugués Mesquita cumple con este requisito, por lo que desde los despachos del Paseo de Cervantes debe acometerse un intenso trabajo. No obstante, ya existen varias operaciones con futbolistas de esta categoría avanzadas y en los próximos días podrían recibir el impulso definitivo que las lleve a convertirse en una realidad sobre el papel.

El trabajo, sin embargo, no se limitará al capítulo de las incorporaciones. Y es que desde el Deportivo Alavés también se trabaja en la búsqueda de posibles salidas para aquellos hombres que, pese a contar con contrato en vigor, no entran en los planes del cuadro técnico para la próxima temporada. En este sentido, nombres como los de Iker Guereñu, Óscar Martínez o Geni están sobre la mesa a la espera de encontrar una solución interesante para todas las partes.

En cualquier caso, si finalmente estas situaciones se enquistaran y fuera imposible cerrar un acuerdo con los afectados, el club evitará realizar nuevas incorporaciones para no sobredimensionar inútilmente la plantilla.