Vitoria. El Deportivo Alavés pondrá en marcha esta misma semana su mecanismo de captación para comenzar a atraer a su afición de nuevo a Mendizorroza con el inexcusable objetivo de conseguir el retorno a Segunda División. Necesita el club vitoriano el respaldo de sus seguidores desde el punto de vista emotivo, pero también desde una vertiente económica que se encuentra sujetada con pinzas y a la que le vendrá muy bien una nueva inyección monetaria.

Los plazos se han extendido más allá de lo inicialmente previsto y, finalmente, será a lo largo de la presente semana cuando los rectores del club vitoriano presenten la nueva campaña de captación de abonados, que tiene que convertirse en un pilar fundamental para encarar la campaña venidera.

El principal problema que se va a encontrar el conjunto albiazul a la hora de despertar de nuevo pasiones entre sus seguidores es el estado de indefinición en el que se encuentra sumido. El divorcio consumado con la Diputación Foral de Álava, las dudas que existen en torno a una ampliación de capital que no acaba de cerrarse y las incertidumbres que rodean el futuro de la entidad son factores de peso en la balanza que pueden cercenar los primeros pasos de la campaña de abonados alavesista.

No son pocos los aficionados del Alavés que se encuentran profundamente disgustados con el modus operandi de Alfredo Ruiz de Gauna desde que asumiera la presidencia de la entidad. Sus promesas incumplidas -aseguró una solución económica para marzo que sigue sin concretarse- y las dudas inherentes a una ampliación de capital que sigue en el aire -y que incluso puede ser impugnada- son dos aspectos que han despertado el resquemor entre una parte del entorno que se encuentra ya cansada de soportar tanta incertidumbre durante tantos años.

Mediatizado por la complicada situación económica, el Alavés también se presentará en el inicio de la campaña de abonados con datos positivos que pueden invitar al optimismo. A pesar de que el regusto de la temporada es pésimo, más aún teniendo en cuenta que la clasificación para el play off se perdió en el último partido en Mendizorroza, no es menos cierto que el tramo final de la temporada sirvió para reavivar la llama de una ilusión que se encontraba ya prácticamente apagada después de muchos años de resultados negativos y un inicio de curso que no respondió a las expectativas inicialmente generadas.

Ese alavesismo que resurgió potente otra vez en los últimos partidos de la pasada campaña es el que llena de optimismo a los rectores albiazules de cara a la campaña de captación de abonados. Los dirigentes del club del Paseo de Cervantes esperan que ese arreón final, culminado con la histórica entrada en el último partido en Mendizorroza, sirva para reenganchar a bastante público cuando se ponga en marcha la maquinara de captación de socios.

Desde el club también se considera que la configuración de una plantilla que los dirigentes califican como de grandes garantías también tiene que ser un importante gancho para que las cifras de abonados de cara a la temporada 2010-11 se acerquen, o incluso superen, las registradas en la campaña 2009-10, cuando alrededor de 8.000 seguidores se hicieron con un abono alavesista.