La asesora técnica de distintas administraciones de Tragsatec, Asunción Gómez, ha destacado la importancia de llevar a cabo programas de recuperación de especies autóctonas, como la del visón europeo, arrinconado por otra especie hermana, aunque invasora, el visón americano.

En ese sentido, el Programa Nacional de Cría y Cautividad de la especie empezó a formarse a partir de 2005 y partir de ahí se han ido entrenando animales para que sean capaces de adaptarse al medio natural y puedan ayudar a reforzar las densidades anteriores a la invasión del visón americano. En varias ocasiones, esa suelta de ejemplares ha tenido lugar en el parque periurbano de Salburua, en el que hay una pequeña colonia.

Gómez señaló que a través de estos programas se ha logrado sacar de la cuenca del Ebro, desde Vitoria hasta Logroño, más de 200 ejemplares de visón americano. “Sin ese trabajo podríamos estar hablando de la extinción del visón europeo en el medio natural”.

La última suelta de visones en Salburua tuvo lugar al final de septiembre de 2023. Entonces, el Ayuntamiento de Vitoria y la Diputación de Álava liberaron nueve ejemplares criados en cautividad dentro de una campaña de recuperación de la especie que permite ya considerar a Álava como territorio libre de la raza invasora del visón americano.

El visón europeo está catalogado en situación crítica de extinción ante la amenaza precisamente del americano. Desde 1998 ambas instituciones han colaborado para recuperar la población de la primera raza y controlar la segunda. Este trabajo ha permitido “desterrar” al visón americano, del que no hay constancia en Álava desde 2019.