Para Alfredo López de Uralde 2021 está siendo una año atípico. Consciente de que la posibilidad de que hubiese celebraciones de San Prudencio era imposible se ha visto con un montón de tiempo que dedicaba a esos menesteres para emplearlo en otras cosas. Lleva 8 años al frente de la Junta Administrativa de Armentia y casi siempre ha tenido que echar mano del paraguas. Este año reza para que haya que volver a hacerlo.
El segundo año que las campas por San Prudencio van a estar vacías...
¿Vacías? ¿Tú crees que la gente no va a venir? Con decirte que lo único que le estoy pidiendo al santo es que sea meón y llueva... Los devotos de San Prudencio que quieren subir a misa van a ser los mismos de siempre, o habrá gente que haga una visita al santo, pero mucha gente, si hace bueno, se vendrá a ver qué hay, a comer en las mesas del bosque o en la campa. Y si esto pasa creamos un problema más gordo porque estamos sin distancias. Estamos en un núcleo muy pequeñito y con el cierre de Vitoria no hay muchos sitios a los que ir€ A ver si me escucha el Santo, se porta y así evitamos problemas.
Además de San Prudencio para todos los alaveses, son las fiestas de Armentia. ¿Haréis algo?
No, no, nada. Se está muy bien de fiesta y se echa mucho en falta hacer ciertas cosas, pero€ Desde hace unos años nos juntamos los 200 vecinos a comer y nos encanta porque es de las pocas veces que estamos todos juntos durante 4 horas, pero no puede ser. El año pasado estábamos confinados y asumíamos que era imposible. Este año podemos salir, pero esta situación asusta y no hay que poner a nadie en riesgo, además de que no se puede hacer. Hay que evitar situaciones peligrosas
Y sin las fiestas en el horizonte, ¿cómo se vive el año y estos días?
Pues mira, yo estoy dedicando más tiempo a la gestión del pueblo. Todo el tiempo que se emplea en preparar todo lo de las fiestas, que es una locura, se destina a otra cosa. Estamos pendientes de recuperar para el uso público y como equipamiento social el antiguo centro hípico que cerró sus puertas hace 25 años. Queremos aprovechar este inmueble del siglo XVI.
Si echa la vista atrás, ¿recuerdas con cariño las fiestas de algún año en concreto?
En ese sentido, todos. Yo soy nacido aquí y llevo la mochila de mis antepasados, que son de aquí, desde 1500 y pico... Si me retrotraigo a cuando era crío, recuerdo a esa sensación de pueblo por el que no pasaba nadie, en el que estábamos los pocos que éramos. Entonces llegaba el día de San Prudencio y venía gente no habitual, puestecitos y era toda una novedad y yo encantado.
¿De los actos que se hacen habitualmente te quedas con alguno?
Mira desde hace unos cuantos años, la víspera de San Prudencio subimos los del pueblo a hacer al Santo una ofrenda floral. Últimamente ya viene más gente y personas que están haciendo el paseo y lo ven se quedan también. Además, hacemos una tamborrada, que la dirige Txapi, y con la excusa nos hicimos una vestimenta para hombres y mujeres, compramos tambores... La gente está muy ilusionada con salir ese día, recorriendo el pueblo. Es bonito. Además, en la ofrenda foral el aurresku lo baila alguien del pueblo y los últimos años he sido yo
Fiestas de su pueblo y su santo, por lo menos no faltará nada de lo típico en la mesa...
Los caracoles no faltan nunca. Este año también he podido cogerlos porque han llovido algunos días y con las temperaturas agradables a los bichos solo les faltaba decir "oye que estoy aquí". El problema se ha dado cuando estábamos tan felices cogiendo caracoles, hemos mirado el reloj y nos hemos dado cuenta que llegaban las 10 y ¡había que estar en casa! Marchabas para casa sabiendo que había para coger y que igual al día siguiente no estaban ahí, pero... otro inconveniente más de la pandemia, pero bueno para los que estamos casa ya tengo. Además, como no se pueden tener invitados, nos llegan.
"Este año toca pedirle al Santo que no se contagie nadie. El resto de cosas ya irán viniendo, pero eso que no vengan, que nadie se contagie"
"Normalmente suben 20.000 personas. Con que este año suban 7.000 ya tenemos el lío porque al aire libre se pierde la precaución. Hay que evitar peligros"