Vitoria - El diputado general de Álava, Ramiro González, aseguró ayer en una entrevista a Onda Vasca que el Presupuesto de la Diputación para 2021 "no va a decrecer" y será "valiente", con las políticas sociales y la reactivación económica como principales pilares. González, que disfruta de la mayoría absoluta que le proporcionan PNV y PSE, tendió la mano sin embargo a la oposición y se mostró dispuesto a llegar acuerdos, aunque le emplazó a que no pida "imposibles" y evite la crispación.

González iba a comenzar ayer mismo con EH Bildu una ronda de contactos con los grupos políticos para exponerles las líneas generales de las Cuentas para 2021, pero la situación en las Juntas, con contagios por covid y confinamientos, ha aplazado esta primera toma de temperatura entre Gobierno y oposición. Hoy González se reunirá con Elkarrekin Podemos y el resto de citas quedan aplazadas, en principio, para la semana que viene.

Sea cuando sea, el diputado general deseaba ayer que los grupos hagan un esfuerzo por llegar a un acuerdo. "Sería especialmente importante el que en nuestro territorio las instituciones y los grupos políticos tuvieran la capacidad de mostrarse unidos ante el reto inmenso que tenemos por delante, sería un mensaje tremendamente positivo para la ciudadanía y los agentes económicos, nos situaría como un territorio de referencia", afirmó.

Así, González ofrecía "flexibilidad" a la hora de negociar a cambio de que Elkarrekin Podemos, PP y EH Bildu no pidan "imposibles". "No pueden venir con una lista inabarcable de demandas imposible de atender, deben ser conscientes de que tratan con gobiernos que tienen el aval de la ciudadanía y la responsabilidad de cumplir con unos compromisos", dijo, apelando tanto a la imposibilidad presupuestaria de abarcar demasiados gastos e inversiones como a la mayoría absoluta de que disfruta el Gobierno foral.

"No pueden pretender trasladar al gobierno foral una lista de pretensiones que saben que son imposibles de abordar en un ejercicio porque los recursos son limitados, y esa tentación la he visto a lo largo de la pandemia, el pretender trasladar que todo se puede solucionar de un plumazo", abundaba en ese sentido.

Eso sí, Ramiro González admitía que "el nivel de crispación de otros lugares" no se da en Álava, y por ello confió en que la oposición se preste a participar del Presupuesto. "Yo creo en la colaboración, en Álava tenemos la figura de la vereda, todos los vecinos trabajan juntos para mejorar el camino, las fincas, para limpiar las calles, y creo que es el momento de hacer vereda, de que arrimemos el hombro", dijo. Y en todo caso, insistió, "tenemos un gobierno con mayoría absoluta y Álava tendrá unos buenos Presupuestos, eso está garantizado".

A la espera de que se celebren las citadas reuniones, sí se conoce la disposición de partida de EH Bildu, que el martes abogaba por "poner a las personas en el centro" en "un contexto especial" a causa del agravamiento de la pandemia. Así, reclamaba al diputado general el refuerzo de los Servicios Sociales, impulsar y mantener el empleo de calidad y apoyar al tejido socioeconómico.

Además, el portavoz de la formación soberanista, Kike Fernández de Pinedo, pedía que se tenga en cuenta a ayuntamientos y agentes sociales a la hora de diseñar el Presupuesto para 2021, y alertó sobre la necesidad de aumentar los ingresos públicos para no tener que endeudar en exceso a la institución.

En cuanto a los ejes de actuación que el diputado general expondrá a la oposición, González explicó que se tratará de "atender a todas las necesidades", a pesar de que "el territorio histórico dispone de muchos menos recursos económicos y recaudación que en los años anteriores". Así, prometió, "el Presupuesto no va a decrecer", pero sí se someterá a un "ejercicio de priorización".

González explicó que las Cuentas serán "valientes" en la medida en que priorizarán "las necesidades que ha puesto encima de la mesa esta pandemia", y por ello los esfuerzos se volcarán principalmente con la reactivación económica y el impulso al empleo, por un lado; y a la protección social, por otro.

Ese esfuerzo obligará a recurrir al déficit, para lo que ya se cuenta con el aval del Estado, y a deuda, pues la pérdida de recaudación calculada para 2020 va a ser de 376 millones de euros y de alrededor de 220 millones para el próximo ejercicio, recordó el mandatario foral.

En todo caso, sí se mostró relativamente optimista con respecto a la evolución de la economía para el próximo año, a pesar de la incertidumbre que genera la pandemia, y afirmó en ese sentido que "la recuperación va a continuar", pero recordó con todo que hay sectores muy castigados por la crisis sanitaria, como el hostelero, que con las nuevas medidas restrictivas impuestas para contener la actual oleada van a sufrir aún más. Si se cumple rigurosamente con las limitaciones decretadas, afirmó, "su tiempo de duración será menor".

El diputado general de Álava admitió que "la ciudadanía alavesa está cansada" tras ocho meses de pandemia, varias semanas de confinamiento, incertidumbre y altibajos, y por ello precisamente defendió la implantación de medidas "que impacten para que tengan su efecto cuanto antes". De todos modos, Ramiro González auguró "un proceso lento" para frenar la curva de contagios en el territorio e incluso, a la hora de plantear un confinamiento total, afirmó que "no hay que descartar absolutamente nada".

diputado general de Álava, ofrecía ayer flexibilidad a la oposición a la hora de negociar las Cuentas y le pedía que no plantee pretensiones "imposibles".

"Yo creo en la colaboración; es el momento de hacer vereda, de arrimar todos el hombro"