vitoria - 880 metros cuadrados de superficie repartidos en dos plantas, casi el triple de lo que ocupaba hasta hora, nuevos recursos como un amplio hospital de día y una apuesta por “homogeneizar” la asistencia en el territorio alavés mediante distintos cambios organizativos. Son tres de los titulares que dejó ayer la inauguración de la nueva unidad de Psiquiatría infanto-juvenil (UPI) de la red de salud mental de Álava, que ya ocupa las plantas quinta y sexta del ambulatorio de Olaguíbel. Como adelantó DIARIO DE NOTICIAS DE ÁLAVA el pasado 17 de agosto, el flamante servicio, que abandona por fin el obsoleto y reducido espacio que hasta ahora ha ocupado en la avenida Santiago, es ya una realidad tras una reforma que se ha extendido durante más de tres meses y ha implicado distintos cambios internos en el centro de salud. La inversión total ha ascendido a 320.060 euros.
El lehendakari, Iñigo Urkullu, visitó las nuevas instalaciones junto al consejero vasco de Salud, Jon Darpón; el director general de Osakidetza, Juan Luis Diego, y responsables y trabajadores del servicio. Como Eguzkiñe de Miguel, directora gerente de la red de salud mental, que ejerció de anfitriona durante la puesta de largo de un recurso que, en sus palabras, va a suponer “un paso más en la atención integral” que Osakidetza quiere ofrecer a la ciudadanía y que, además, permitirá “mejorar su calidad”. Por su parte, Urkullu destacó que la apertura de la UPI constituye “un ejemplo más de la apuesta por un sistema de salud público, de calidad y universal” del Gobierno Vasco, entre cuyas “prioridades” están tanto la atención de los jóvenes como la detección temprana de la enfermedad mental, “clave para paliar la cronicidad de dicha patología y sus secuelas”.
Un extenso espacio destinado a las consultas, áreas de admisión, salas de grupo, un botiquín o el citado hospital de día, que permitirá realizar tratamientos intensivos sin el peligro del desarraigo que puede implicar la hospitalización del paciente y separarlo de su medio de vida, componen parte de la estructura del servicio. En él se proporcionarán tratamientos multimodales y “altamente estructurados” gracias a una amplia variedad de recursos a los que es difícil de acceder en un contexto ambulatorio y limitado en el tiempo, tales como las terapias individuales, grupales, familiares o la actividad educativa o de ocio. Cinco psiquiatras, seis psicólogos, tres enfermeras especialistas en salud mental, un trabajador social, un administrativo, un auxiliar de enfermería especialista y un terapeuta ocupacional a tiempo parcial componen la plantilla de la UPI.
La actividad asistencial del servicio supera en la actualidad las 11.000 consultas al año, por las que pasan cerca de 1.800 pacientes que presentan un amplio abanico de patologías que van desde los trastornos adaptativos o los del espectro autista hasta enfermedades mentales graves como las psicosis infantiles. Sin embargo, ahora podrán ser más porque otras dos novedades que vienen acompañadas de la inauguración de la UPI son la ampliación de la edad máxima de los pacientes a los que asistirá de los 16 a los 18 años, así como la asunción de la atención infanto-juvenil de la Cuadrilla de Ayala, tradicionalmente bajo el paraguas de Bizkaia en lo que a la Sanidad respecta. Esto permitirá, según Osakidetza, avanzar en la “perspectiva integral” hacia la que quiere ir la atención a la salud mental, “acorde a un modelo comunitario”.
reubicaciones Para hacer hueco al flamante servicio, el ambulatorio ha experimentado un necesario movimiento de piezas interno que ha reubicado varios de sus viejos servicios para liberar espacio en las plantas quinta y sexta, como paso previo a la adecuación de la UPI. En concreto, han pasado a la segunda planta de Olaguíbel las consultas de Dermatología, la sala para el personal y una sala polivalente hasta ahora ubicadas en los niveles superiores del centro de salud, donde también han sido reubicados en otros niveles inferiores recursos como la lencería de atención primaria, un local sindical y un almacén de Radiología. Estos movimientos han sido posibles a su vez tras la progresiva salida de Olaguíbel a otros recursos de la OSI Araba de servicios y despachos como los de Traumatología, Otorrinolaringología u Oftalmología, un servicio ahora centralizado en el también vecino HUA-Santiago.
El traslado a Olaguíbel de la UPI y la consiguiente ampliación de sus espacios va a permitir añadir a su cartera de servicios el programa de atención intensiva (PAI) en trastorno mental grave que hasta ahora se realizaba en un local de la calle Angulema. Al mismo tiempo, el recurso mantendrá su colaboración con otras instituciones como el Departamento de Educación para la atención de los menores con necesidades educativas especiales o la asociación Autismo Araba para la prestación de un programa terapéutico complementario a los niños que presenten trastorno del espectro autista.
880
Metros cuadrados ocupa la nueva unidad de Psiquiatría infanto-juvenil, el triple del espacio anterior.
2
Plantas del ambulatorio de Olaguíbel, la quinta y la sexta darán cabida a sus instalaciones.
0,32
Millones de euros ha invertido el Gobierno Vasco en la adecuación y puesta en marcha del servicio.
1.800
Pacientes al año atiende la UPI, aunque ahora podrán ser más por los cambios organizativos introducidos en el servicio.
17
Especialistas de la psiquiatría, la psicología o de la enfermería especializada componen la plantilla a tiempo completo de la UPI.
18
Edad máxima de los pacientes que dependerán de la nueva unidad, tras ser ampliada en dos años, desde los 16.