Vitoria.De Andrés ha comparecido hoy ante la Ponencia de Autogobierno del Parlamento Vasco que analiza la actualización del autogobierno en Euskadi.El también secretario general del PP alavés ha insistido en que si se va hacia un nuevo estatus político en el conjunto del País Vasco se debe "reeditar" la confianza que dieron los alaveses al actual texto de Gernika, tiene que haber una "nueva aceptación" del marco.

Ha añadido que no cree que "haya nadie que piense que Álava tendría que aceptar lo que impongan Bizkaia y Gipuzkoa", cuando este territorio se "embarcó" en la autonomía vasca con unas condiciones específicas, de relaciones internas con los otros territorios y con el resto de España, que, ha argumentado, ahora no se pueden modificar sin más.

Por ello, ha considerado que una modificación del autogobierno debería ser ratificado en cada uno de los tres territorios y su decisión debería ser "vinculante".

"Álava tiene voz y voto en un nuevo estatuto, cada ciudadano individualmente y en su conjunto", porque tiene un papel como "actor político territorial", ha sostenido.

De Andrés ha hablado de una "Álava reivindicativa", más que "agraviada o quejosa" como ha dicho algún parlamentario, porque es la menor en población de las tres y porque su representación política "es diferente a la mayoritaria en el País Vasco".

El diputado general de Álava ha argumentado que una actualización del autogobierno en Euskadi debería "respetar la identidad de cada territorio, sin imposiciones dogmáticas" y ha criticado que desde hace tiempo se está produciendo por parte de las formaciones nacionalistas un intento de "unificación" que está provocando "desconfianza" en parte de la sociedad alavesa.

Ha rechazado la "voluntad de igualación" de los tres territorios y ha explicado que si existe esa intención por parte de algunos es porque, evidentemente, hay diferencia entre ellos.De Andrés ha argumentado que hay cierto descontento entre sectores de la sociedad alavesa más con la gestión que se ha hecho del autogobierno que por el propio marco como tal, y ha puesto como ejemplo la ley de aportaciones actual con la que "sale beneficiado un territorio en perjuicio de los otros dos, porque hay una mayoría política que así lo decide".

Por ello, propone que se blinde la "singularidad" de cada territorio de las coyunturas del gobierno de cada momento y que se eviten discriminaciones como las que, a su juicio, se han dado por ejemplo en materia lingüística.

Ha reclamado que si se actualiza el autogobierno se derribe el "muro" que ha representado para los alaveses la acreditación del euskera para acceder a la función pública y, en este sentido, se ha preguntado cuántos alaveses trabajan en la administración en Bizkaia y Gipuzkoa y cuántos vizcaínos y guipuzcoanos en Álava.