PNV y PSOE han acercado posiciones con la idea de hacer posible por primera vez un “acto de desagravio” para Gernika por el bombardeo contra la población civil que sufrió el 26 de abril de 1937. Cuando se cumplen 85 años desde el ataque de la Legión Cóndor alemana y la aviación italiana en connivencia con el bando franquista, el PNV ha llevado este martes al Senado una moción que ponía el foco en el papel del bando sublevado. Pero pretendía también que el Gobierno español pidiera “disculpas” por lo sucedido. Los socialistas seguían incómodos con esa referencia porque se proclamaron como los legítimos herederos del Gobierno republicano agredido, y el debate iba a naufragar un año más. De ahí que ambos se pusieran manos a la obra para trabajar en una transaccional.

El texto que se espera que salga adelante insta al Gobierno español a reconocer la responsabilidad del ejército sublevado y del posterior Gobierno franquista, dice que el ataque se dirigió contra Gernika pero también el Gobierno republicano y el vasco, e insta a que “realice un acto explícito de recuerdo del sufrimiento causado a la villa de Gernika y sus habitantes, que contribuya al desagravio y reparación”.

EL TROPIEZO DEL PP

A falta de que se vote este miércoles, esa redacción podría salir adelante, también con el aval de EH Bildu, los soberanistas catalanes, la izquierda y grupos como Teruel Existe. Como cabía esperar, el PP se opuso y presentó su propia enmienda para sustituir todo el texto por un reconocimiento a la Transición y superar los bandos y las heridas. Pidió que no se repitan los bombardeos a civiles. Pero el texto no decía una sola palabra del bando franquista.

El PP, aunque condena el ataque, ya fue el responsable en 2017 de que se tumbara en el Senado una propuesta de desagravio a Gernika. Amalia Salanueva protagonizó el momento más embarazoso este martes. Llegó a preguntar al PNV qué le parecería que alguien exigiera a Urkullu que pidiera perdón por los muertos en las cárceles. Los jeltzales respondieron desde su bancada: “Ya lo ha hecho”. La popular, muy contrariada, respondió: “Lo habrá hecho, pero no es su responsabilidad”. Las carcajadas retrataron su patinazo.

EL PNV DENUNCIA EL SILENCIO

Desde el PNV, la senadora Estefanía Beltrán de Heredia reconoció como un gesto positivo que el Consejo de Ministros condenara hace unos días el bombardeo, pero consideró que fue “insuficiente” porque deberían haberse ofrecido disculpas. Recordó que la dictadura franquista extendió durante cuatro décadas la mentira de que la autoría del bombardeo correspondió al bando republicano, sin que el Estado hay pedido perdón. “Solo ha habido silencio con Gernika”, afeó.

Para insistir en que el Estado debe disculparse, argumentó que el presidente alemán Herzog pidió perdón por el bombardeo, que Hollande reprobó los crímenes del colonialismo francés, e incluso Obama se acercó a Hiroshima: “La responsabilidad subsiste con independencia de los cambios de gobierno”.

EL PSOE EVITA PEDIR PERDÓN

Aunque la moción del PNV ya aclaraba en su primer punto que la autoría del bombardeo fue franquista, el PSOE registró una enmienda para borrar el segundo punto que hacía referencia a la petición de disculpas. Quería cambiarla por una declaración de condena que señalaba que el Gobierno español es el “heredero” del republicano que sufrió el ataque. Solo hablaba de “impulsar todas las acciones de memoria”, pero la transaccional con el PNV hila más fino con un acto de “desagravio”.

La socialista vasca Julia Liberal matizó que “ha habido más de un Gernika en España” y que “este Gobierno es el heredero del que sufrió este avasallamiento”. “Hemos presentado una enmienda porque no estamos de acuerdo en que tengamos que pedir perdón en sí”, dijo.

MÁS MUNICIPIOS, PERO GERNIKA COMO SÍMBOLO

Beltrán de Heredia confirmó que se iba a alcanzar un acuerdo con el PSOE para priorizar una imagen de unidad, un gesto, en este 85 aniversario. Al PP le dijo que parten de posiciones en las antípodas e insistió en que el PNV reivindica “la verdad” porque hay “demasiado sufrimiento silenciado”.

La jeltzale puntualizó como guiño ante las enmiendas de otros grupos (como Teruel Existe o la Izquierda Confederal) que fueron muchos los pueblos y ciudades con bombardeos, aunque pidió que la propuesta se centrara en Gernika como símbolo.

EH Bildu anunció su respaldo a la transaccional aunque le parezca insuficiente porque admitió que es “un paso adelante”.