Bruselas - Los jefes de Estado y de Gobierno de la Unión Europea (UE) estudiaron ya sin la primera ministra británica, Theresa May, qué soluciones o garantías pueden dar a la mandataria para facilitar la ratificación del acuerdo del Brexit en el Parlamento del Reino Unido. May abandonó la cumbre de líderes poco después de las 21.00 horas sin hacer declaraciones.
Los líderes de la UE escucharon primero a la primera ministra británica y después, ya sin ella, analizaron qué aclaraciones o garantías pueden proporcionarle sobre el plan de salvaguardia para evitar una frontera física en la isla de Irlanda. En cualquier caso, los países que seguirán en el club comunitario tras la marcha del Reino Unido tienen claro que el acuerdo de retirada aprobado el 25 de noviembre no se puede renegociar.
A su llegada a la reunión de líderes, May reconoció que no espera que los Veintisiete le concedan de forma inmediata las garantías que necesita para que el pacto sobre el Brexit sea ratificado por la Cámara de los Comunes, pero confió en que puedan trabajar sobre ellas “tan pronto como sea posible”.
La primera ministra británica decidió el lunes aplazar la votación del acuerdo de salida en la Cámara de los Comunes, que estaba prevista para el día siguiente, con el fin de utilizar la cumbre de ayer y hoy para intentar obtener más garantías de los Veintisiete con respecto a la salvaguarda para Irlanda del Norte.
El objetivo es evitar un eventual rechazo al texto, ya que algunos de los diputados conservadores y muchos parlamentarios de la oposición habían indicado que votarían en contra, sobre todo por la salvaguarda para evitar una frontera física en Irlanda.
Por otra parte, los jefes de Estado y de Gobierno de la Unión Europea prevén pedir hoy a sus ministros de Finanzas que trabajen en el diseño de un posible presupuesto para la eurozona, una medida que busca mejorar la preparación ante posibles crisis pero que genera divergencias entre los Estados.
Los líderes europeos pedirán a sus ministros de Economía y Finanzas (el Eurogrupo) que trabajen en el “diseño, modalidades de implementación y calendario” de un instrumento presupuestario para la eurozona, según el borrador de las conclusiones de la cumbre del euro que se celebra mañana, al que tuvo acceso Efe.
Asimismo, invitarán a la Comisión Europea a que presente una iniciativa legislativa para este instrumento presupuestario y esperan preparar un acuerdo al respecto entre los países para junio de 2019.
Este presupuesto serviría para reducir las divergencias económicas entre los 19 países que comparten la moneda única y aumentar su competitividad, y se enmarcaría dentro del presupuesto plurianual comunitario, aunque su tamaño aún debe ser determinado, según el documento.
Fuentes europeas señalaron que hay una “masa crítica” de países que respaldan que el Eurogrupo siga trabajando en este instrumento, pero aún está en discusión el grado de detalle del mandato para los ministros. “Será la parte más controvertida de la discusión del viernes”, apuntaron.
Un impulso desde francia La idea de un presupuesto para la eurozona ha sido impulsada principalmente por Francia, a la que se ha sumado recientemente Alemania, dentro de los esfuerzos para reforzar la eurozona ante futuras crisis. El Eurogrupo logró la semana pasada un acuerdo para este fin que incluye medidas para reforzar el poder del Mecanismo Europeo de Estabilidad (MEDE), el fondo de rescate europeo, y establecer el cortafuegos para el Fondo Único de Resolución Bancaria.
Sin embargo, los ministros dejaron en manos de los líderes la decisión de aprobar un mandato para trabajar en este instrumento presupuestario, que genera las reticencias de varios países. De hecho, el Eurogrupo constató que no existe consenso para que los fondos de un potencial presupuesto se utilicen para ayudar a países individuales a estabilizar sus economías cuando atraviesen crisis puntuales, pese a que la Comisión Europea, el Banco Central Europeo y muchos países insisten en que es necesaria una herramienta de este tipo. A la idea se opone un grupo de países liderado por Holanda con Finlandia, Suecia, Dinamarca, Estonia, Letonia, Lituania, Irlanda, República Checa y Eslovaquia. - Efe
Ucrania. Los jefes de Estado y de Gobierno de la Unión Europea pidieron ayer la puesta en libertad “inmediata” de los marineros ucranianos detenidos por Rusia y el libre paso “de todos los barcos” en el estrecho de Kerch. “El Consejo Europeo pide la liberación inmediata de todos los marineros ucranianos detenidos, la devolución de los buques y el libre paso de todos los barcos a través del estrecho de Kerch”, escribió el presidente del Consejo Europeo, Donald Tusk, en Twitter.
Refuerzos. Fuentes comunitarias indicaron también que los líderes de la UE aprobarían conclusiones en las que contemplan la posibilidad de considerar medidas, “incluido reforzar el apoyo” a las zonas afectadas en Ucrania por la crisis en el estrecho de Kerch, que une los mares Negro y de Azov. Ese apoyo consistiría en acelerar los programas de ayuda de la UE a esas áreas de Ucrania, según dijeron las mismas fuentes.