Vitoria, 16 ene (EFE).- La responsable foral de Medio Ambiente ha comparecido hoy en las Juntas Generales del territorio, a petición del PNV, para fijar su posición con respecto a los planes del Gobierno Vasco de sondear la posibilidad de explotar varios yacimientos de gas no convencional, es decir pegado a la roca, en Álava.

Ruiz ha anunciado que el próximo día 25 se reunirá una mesa técnica compuesta por representantes del Gobierno Vasco, de la Diputación y del Ayuntamiento de Vitoria, a petición de la institución foral, para estudiar en detalle el proyecto.

La intención de Ruiz es que esta mesa se convierta en una comisión permanente de seguimiento del proyecto.

Ha explicado que toda la información de la que dispone sobre esta iniciativa la ha obtenido a través del Ente Vasco de la Energía (EVE), del que depende la Sociedad de Hidrocarburos de Euskadi (SHESA), que se va a encargar de llevar a cabo los sondeos mediante la técnica de fracturación hidráulica, más conocida como "fracking".

Ruiz ha garantizado que hasta el momento no se ha llevado a cabo ninguna actuación que tenga un efecto dañino e irreversible sobre el medio ambiente y ha asegurado que se opondrá si sucede o detecta que hay probabilidades de que ocurra, según han explicado a Efe fuentes de la institución foral.

También ha aclarado que la Diputación no tiene competencias para hacer una declaración de impacto ambiental del proyecto pero ha anunciado que ha encargado un estudio a técnicos de su departamento para que analicen los riesgos ambientales que conlleva.

El informe no será "vinculante" para el Gobierno Vasco pero es un documento a partir del cual se podrán extraer conclusiones.

En su comparecencia, Ruiz no ha querido pronunciarse sobre el proyecto hasta que los técnicos de la Diputación lo evalúen pero ha hecho hincapié en que no estará de brazos cruzados en torno a este tema.

Por otro lado, también ha indicado que todavía tiene pendiente reunirse con el nuevo ministro de Medio Ambiente, Miguel Arias Cañete, tras su toma de posesión del cargo, y ha explicado que en ese encuentro este proyecto estará sobre la mesa, puesto que la declaración de impacto ambiental corresponde al Ministerio.

En una nota, la vicepresidenta del sindicato agrario alavés UAGA, Idoia Arrazola, ha denunciado que el Gobierno no ponga ningún reparo a usar esta técnica agresiva y, en cambio, cada vez exige más al sector primario que utilice métodos de producción respetuosos con el medio natural.

También ha criticado que "mientras el sector primario tiene problemas para gestionar una gran parte de sus purines y estiércol, que son residuos naturales, al Gobierno Vasco parece no preocuparle cómo gestionar todo el volumen de agua 'alterada' que hay que usar en el proceso o cómo evitar que no se mezcle con el acuífero de Subijana o el cuaternario de Vitoria, que siguen siendo las principales reservas de agua a futuro". EFE