UNO deja pasar unos días El conquistador del fin del Mundo y ve que no avanza mucho. Se diría que se ha convertido en un juego donde siempre ganan Juanito y Korta. El resto de los concursantes los miran entre sorprendidos y cabreados porque tras varias ediciones, nadie como ellos sabe en qué consiste ese extraño y caprichoso juego que proponen en boca de Julian Iantzi. Han perdido parte de la capacidad para sorprender. Da la sensación de que el juego de capitanes convierte el concurso en algo ya visto y con tendencia al aburrimiento.

Algo que le comienza suceder también a GH 13. Su enfrentamiento con el chapuzón de Falete lo ha dejado tan tocado que ya se comienza a hablar de crisis. Y ya era hora de que alguien pusiera en apuros este negocio redondo que Telecinco propone todos los años y que contaba con el aval incuestionable de la audiencia. Ya ven qué poco fieles somos los espectadores de televisión. Dejamos los juegos íntimos bajo el edredón por verle los michelines al personal. Mientras por aquí nos remojamos en pleno invierno y con la hola de frío golpeando de nuevo en nuestras ventanas, se nos cuela una inquietante noticia de que un periódico mexicano ha decidido no sacar ya noticias relacionadas con el narcotráfico y el crimen organizado. Una lacra que ha convertido en un infierno la vida de millones de mejicanos y que tiene amenazados a cientos de periodistas que cubren el tema. Malas noticias para la libertad de prensa esta de que compañeros hayan tirado la toalla y se atrevan a mentar a la mafia. Vista con la perspectiva de las grandes cadenas algo que ya estamos padeciendo en estos lares donde hace tiempo que se abandonaron los programas de investigación por el cotilleo. Lo que en México han conseguido los criminales aquí nos lo justifican los expertos con la excusa de que es lo que les pide la audiencia.