El ex ministro de Justicia belga Vincent Van Quickenborne, que dimitió el pasado viernes por un error "descomunal" jurídico detectado en la investigación del atentado del lunes 16 en Bruselas, reveló en una emisión de televisión haber sufrido abusos sexuales de un sacerdote en su infancia.

La revelación de Van Quickenborne se produjo de forma espontánea anoche en el programa "De tafel van Gert" emitido en el canal de televisión flamenco Play4, según recoge la prensa belga.

En un internado

Van Quickenborne comentó que esos abusos se produjeron durante su infancia en un colegio de Gante, donde estaba en un internado, y cuyo nombre no desveló.

El sacerdote, que ya ha fallecido, entraba a las habitaciones de los alumnos del internado "de buena reputación" cuando estaban enfermos y les pedía que se quitarán los pantalones para abusar de los menores, señaló.

"Estos son hechos serios. Los muchachos hablaban de eso entre ellos, pero no se informó en ese momento" a la dirección del colegio ni a sus familiares, dijo el exministro, que agregó que no había revelado la historia antes porque "el sufrimiento infligido a otras personas" en otros casos de abusos sexuales en el seno de la Iglesia Católica belga "eran mucho más grandes".

Comisión de investigación

El ex ministro se refería a los testimonios recogidos en el documental "Godforgotten" emitido por la televisión flamenca y que ha motivado incluso la reciente apertura de una comisión parlamentaria para investigar los casos denunciados.

Cuando él y el primer ministro belga, el también liberal Alexander De Croo, visitaron recientemente al sacerdote Rik Devillé, que ayuda a las víctimas de abuso sexual en la Iglesia, para hablar sobre el documental, Van Quickenborne mencionó el nombre del sacerdote involucrado e "inmediatamente" le dijo "que su nombre aparecía en sus expedientes", afirmó el exministro.

Van Quickenborne dimitió el viernes pasado después de que se supiera que Abdesalam Lassoued, el terrorista que mató a dos ciudadanos suecos en el ataque del pasado lunes 16 en Bruselas, no fue extraditado a Túnez en 2022 a pesar de la solicitud cursada por el país africano, que quedó en un armario de un magistado.

Luego, el nombramiento el pasado domingo del sucesor de Van Quickenborne, Paul Van Tigchelt, provocó una revuelta interna dentro del partido de De Croo, que ya solo cuenta con un 6 % de apoyo en las encuestas.

Una de las ex presidentas del partido que sonaba para sustituir a Van Quickenborne anunció a principios de esta semana que abandonará la política nacional, mientras que otras amenazan con independizarse.