En los últimos tiempos, mantener la seguridad de la vivienda se ha convertido en la principal preocupación de gran parte de la ciudadanía, motivada, en buena parte, por las ocupaciones ilegales y el aumento de robos

Dejando a un lado el problema que supone la pérdida material, los inquilinos viven una gran sensación de vulnerabilidad. Y los delincuentes, aprovechándose de momentos de ausencia de estos o el mal estado del inmueble, no dudan en acceder a él. 

Como consecuencia, esta situación empuja a muchas personas a aumentar las medidas de seguridad en su casa. Y, al mismo tiempo, se deben conocer los métodos más empleados por los ladrones para entrar en viviendas. 

El 'bumping': el método silencioso que alarma a los expertos

Los especialistas en este campo alertan de un método llamado ‘bumping’ que los ladrones han ido empleando y que es muy útil por su rapidez y eficacia. Cabe decir que es muy silencioso y discreto para abrir cerraduras en cuestión de segundos. 

El procedimiento consiste en meter una llave manipulada, conocida como ‘bump’ en el interior del bombín. De un golpe seco, los pistones internos de la cerradura saltan lo suficiente para poder girar la llave y abrir la puerta sin complicaciones.

Por si fuera poco, es un método que no demanda de habilidades avanzadas y ni aspectos técnicos: basta con tener conocimientos básicos de herramientas. Suele tener éxito en cerraduras antiguas o tradicionales que no tengan sistemas de protección. 

Además, el ‘bumping’ es muy discreto: suele pasar desapercibido y reduce la posibilidad de ser sorprendidos en pleno acto. 

Medidas básicas de protección

Para poder protegerse de esta amenaza, lo más recomendable es reforzar los puntos débiles de un hogar. Por eso mismo, nada mejor que instalar un bombín ‘antibumping’ de alta seguridad, impidiendo que los pistones se desplacen y bloqueando estos ataques.

Asimismo, los expertos sugieren otro recurso sencillo de aplicar: colocar un escudo protector en la cerradura para reforzar la zona exterior del bombín y que así sea más difícil manipular la puerta.

Por otro lado, un sistema de videovigilancia o de alarma casi imperceptible, sobre todo en zonas comunes y entradas, sirven como elemento disuasorio para los ladrones de casas. 

El desconocido truco que usan los ladrones para entrar en tu casa Freepik

Otras soluciones prácticas para evitar robos

Dejando a un lado las clásicas recomendaciones, hay muchas más formas de cuidar el hogar. Una de ellas es colocar sensores de movimiento en el perímetro de la casa para limitar cualquier acceso: se pueden conectar con luz automáticas o emitir señales acústicas. 

Por otra parte, las cerraduras inteligentes le dan más garantía todavía al inmueble. Ya sea con un mando, teléfono móvil u otro dispositivo, el propietario puede controlar en tiempo real y monitorizar el sistema de seguridad de la casa a su conveniencia. 

Tampoco podemos olvidar que mantener una buena relación con los vecinos es algo muy importante para la convivencia y la seguridad de todos. Gracias a la colaboración, es mucho más fácil evitar delitos y prepararse ante cualquier imprevisto.