Hoy en día, hacerse con una vivienda en propiedad es una de las preocupaciones principales de la mayoría de la sociedad. En el caso de Euskadi, adquirir una es realmente complicado, pues, según fuentes especializadas, es la tercera comunidad autónoma en todo el Estado con el precio de metro cuadrado más alto, tan solo por Madrid y Baleares.
Sin embargo, esto no significa que sea una misión imposible, pues dentro de las provincias vascas, hay opciones realmente asequibles y con precios relativamente baratos para quienes apuesten por vivir alejados de las grandes ciudades.
El pueblo vasco más barato
Aunque Álava es el territorio más barato de Euskadi en lo que al metro cuadrado se refiere, con un valor de 2.280 euros de media, el municipio en el que podemos encontrar las viviendas más accesibles está dentro de Bizkaia.
Se trata de Karrantza, dentro de la comarca de Enkarterri. Es un tranquilo pueblo rodeado de naturaleza y con una población estimada de 2.700 habitantes, con más de 130 kilómetros cuadrados y muchos barrios y distritos poblacionales.
En Karrantza, el precio del metro cuadrado para una casa se sitúa en torno a los 914 euros y por debajo en comparación a otros de Bizkaia. Respecto a los precios, podemos hallar viviendas de más de 200 metros cuadrados por aproximadamente 30.000 euros.
Tipos de viviendas
La mayoría de inmuebles que podemos encontrar en Karrantza, de acuerdo en webs como pisos.com o Idealista, son caseríos de piedra a reformar, con hasta dos plantas algunos de ellos. Debido a su espacio, vale la pena reformarlos para sacarle el máximo provecho.
Otro tipo de propiedades, también a restaurar, son casas, chalets y pisos con cuatro habitaciones y dos baños. Del mismo modo, en Karrantza podemos dar con inmuebles que sirven como alojamiento rural o casa de alquiler.
Muchas de estas viviendas cuentan con entre 200 y 400 metros cuadrados de media. En cuanto al precio, oscilan desde el más bajo, 30.000, hasta el más alto, 600.000 euros.
¿Qué hacer antes de comprar una vivienda?
Comprar una vivienda es una decisión importante que requiere una planificación cuidadosa. Estos son algunos consejos clave para guiarte en el proceso.
Evalúa tu situación financiera
Antes de buscar un inmueble, analiza tus ingresos, gastos, y ahorros. Fija cuánto puedes destinar al pago inicial y si puedes obtener un crédito hipotecario. Es recomendable que tu cuota mensual no exceda el 30% de tus ingresos.
Define tus necesidades
Establece qué tipo de vivienda buscas (casa, chalet, apartamento, etc.), el tamaño necesario, y la ubicación preferida. Considera factores como la cercanía al trabajo, escuelas, transporte público y servicios.
Investiga el mercado inmobiliario
Conoce los precios promedio en las zonas que te interesan y observa las tendencias del mercado. Esto te ayudará a identificar oportunidades y evitar pagar más de lo necesario.
Obtén una preaprobación de crédito
Tener una preaprobación te dará una idea clara de la cantidad que puedes pedir prestada y te posicionará como un comprador serio y solvente.
Mira los costes adicionales
Además del precio de la vivienda, incluye en tu presupuesto los gastos de cierre, impuestos, seguros, y posibles renovaciones o reparaciones. Esto evitará sorpresas financieras después de la compra.
Visita varias propiedades
No te precipites con la primera opción. Compara varias viviendas para asegurarte de encontrar la mejor relación calidad-precio. Considera la antigüedad de la propiedad, su estado, y cualquier problema estructural.
Consulta a un profesional inmobiliario
Un agente inmobiliario puede guiarte durante el proceso, ofrecerte asesoramiento experto y ayudarte a negociar el mejor precio.
Realiza una inspección técnica
Antes de cerrar la compra, es fundamental hacer una inspección para detectar posibles problemas ocultos que podrían generarte gastos imprevistos.
Revisa los documentos legales
Asegúrate de que toda la documentación esté en regla. Revisa el título de propiedad, posibles gravámenes, y comprueba que no haya problemas legales.
No te precipites
Comprar una vivienda es un paso significativo. Tómate el tiempo necesario antes de seguir adelante con el proceso.