Alberto Guzmán 2022-01-10 En el bello paÃs de la 'Liberté, égalité y fraternité' también se ponen petardos. Especialmente la prensa amarilla que se edita en ParÃs, que aunque escasa se hace mucho de notar. Y estos dÃas, el blanco de todas sus columnas está siendo la primera dama, de quien afirman (falsamente) que es una mujer transexual. Una realidad adulterada que aunque fuese cierta deberÃa dar exactamente igual, y más en un paÃs que se vanagloria del respeto a la intimidad. Para todos menos para Brigitte, que ya ha acudido a los tribunales.