En plena Semana Santa, hay un día que no podemos dejar de lado por su gran sentido espiritual y religioso: Viernes Santo. Se trata de una jornada en la que se recuerda la pasión, crucifixión y muerte de Jesús y que reúne a los cristianos en un entorno serio y silencioso, en un ritual cargado de simbolismo. 

Al igual que el Jueves Santo, esta jornada forma parte del Triduo Pascual, tres días de liturgia que evocan los últimos momentos de la vida de Cristo: su pasión, muerte y resurrección. 

Las raíces del Viernes Santo

El origen del Viernes Santo se remonta a los pasajes de la Biblia en donde se narran los sufrimientos de Jesús antes, durante y después de la crucifixión. Tal y como cuentan los Evangelios, el gobernador romano Poncio Pilatos, tras ser este proclamado “rey de los judíos”, decidió condenarlo a muerte.

Más tarde, Cristo fue despojado de sus pertenencias y prensa, flagelado, coronado con espinas y obligado a llevar su cruz hasta el Monte Calvario, donde fue crucificado entre dos ladrones. 

Allí, bajo el cartel que afirmaba INRI ("Jesús el Nazareno, Rey de los Judíos"), vivía sus últimos instantes pronunciando las famosas Siete Palabras. Estas contienen pensamientos y lecciones acerca de valores como la redención, el perdón y la relación de Dios con los humanos. 

Procesión de Semana Santa en Vitoria Jorge Muñoz

Liturgia y ritos de este día

Asimismo, el Viernes Santo es una fecha de luto en la que no hay Eucaristía. Por lo tanto, en vez de llevar a cabo la clásica misa, se realiza la Liturgia de la Pasión del Señor, un acto solemne que se celebra justo en el momento exacto en el que Jesús falleció en la cruz.

Una de las tradiciones más famosas es la procesión del Vía Crucis, un recorrido que repasa las catorce estaciones del sufrimiento de Cristo, desde su castigo hasta su entierro. Durante su paseo por las calles, se realizan oraciones y meditaciones, cubriendo las imágenes de Cristo con telas moradas en señal de su ausencia. 

Ayuno y abstinencia

El ayuno y la abstinencia son prácticas muy frecuentes en el Viernes Santo. Los católicos suelen abstenerse de consumir alimentos como carne a modo de penitencia. Este acto de ayuno, en memoria del sufrimiento físico de Jesús, puede llegar a ser total dependiendo de la región. 

Si bien esta práctica sirve para participar en la agonía de Cristo, las prácticas no son las mismas, pues las tradiciones donde se celebren cambiarán según cada cultura. Mientras que los católicos y protestantes suelen participar en el ayuno, los ortodoxos no siguen esta norma. 

Una procesión de Semana Santa por las calles de Vitoria Jorge Muñoz

Calendario litúrgico de Semana Santa

Las celebraciones de la Semana Santa pueden variar en función del territorio en donde se celebren. No obstante, las siguientes fechas más importantes marcadas en el calendario son, sin incluir el Viernes Santo, Sábado Santo (19 de abril), Domingo de Resurrección (20 de abril) y Lunes de Pascua (21 de abril).