- El Ministerio del Interior español trabaja con un censo de más de 600 bandas juveniles activas en la actualidad en todo el Estado, incluyendo las de extrema derecha y extrema izquierda, bandas latinas y las relacionadas con la violencia en el deporte, y contabiliza 117 detenciones por su relación con grupos juveniles violentos en el primer semestre de 2021.
Según explican fuentes de Interior, se ha pasado de 595 bandas monitorizadas por las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado en 2019, a un total de 627 en 2021. Los datos de 2021 señalan que, sólo entre los catalogados policialmente como “grupos de referencia”, existen nueve de extrema derecha, cinco de extrema izquierda, siete bandas latinas y una relacionada con otra tipología como la violencia en el deporte. En lo referente a los conocidos como “grupos independientes”, aparecen 46 de extrema derecha y otros 43 de extrema izquierda, así como 15 bandas latinas. Además, existe un tercer grupo, los clasificados como “subordinados”, donde destaca la cifra de 334 bandas relacionados con la extrema izquierda, frente a los 27 de extrema derecha, así como 65 bandas latinas y 75 relacionados con la violencia en el deporte y otros tipos.
Dentro de la estrategia para luchar contra los delitos de odio, Interior anunció hace meses que está revisando el conocido como Plan de Actuación y Coordinación Policial contra Grupos Organizados y Violentos de Carácter Juvenil, en vigor desde 2014. En el marco de dicho plan, Interior lleva contabilizadas 117 detenciones en 214 diligencias policiales abiertas en el primer semestre de 2021. El año con mayor número de arrestos por esta causa fue 2015, cuando se practicaron 265 detenciones en un total de 449 diligencias.
La información consta en una respuesta parlamentaria a una pregunta formulada por el grupo de EH Bildu, donde se desglosan las operaciones. “Si bien el actual Plan ha dado buenos resultados durante su vigencia”, señala el Gobierno en su respuesta, “es necesario adecuarlo a las necesidades puestas de manifiesto a partir la práctica obtenida”. En este sentido, apunta que se han iniciado los trabajos de revisión, “al objeto de contar con una herramienta que aborde la problemática desde una perspectiva integral”.
Según la información facilitada, en 2014 se llevaron a cabo 183 detenciones en 473 diligencias policiales contra grupos organizados y violentos de carácter juvenil. Un año después se alcanza la mayor cifra de la serie, con 265 arrestos, para bajar a 141 en 2016 y 91 detenciones en 2017. El año 2018 se practicaron 141 detenciones en 313 operaciones, una cifra que baja hasta 136 arrestos en 2019, para cerrar 2020 con el mínimo de la serie: 77 detenciones en 286 actuaciones. El confinamiento provocado por la pandemia trajo consigo un descenso en todas las actividades delictivas.
El plan de actuación se remonta a la etapa de Francisco Martínez como secretario de Estado de Seguridad, que fue la persona dentro del Gobierno del PP que firmó una instrucción que, según explicó Interior, “buscaba dar respuesta a los comportamientos antisociales ejercidos por menores y jóvenes integrados en bandas o grupos organizados”.
“Si bien la violencia asociada a este tipo de grupos ha llegado a despertar, en algunas ocasiones, una considerable alarma social, lo cierto es que constituye un fenómeno que no ha tenido una incidencia elevada en nuestro país en términos delictivos”, sostenía Interior en 2014. El departamento señalaba que las acciones desarrolladas por este tipo de bandas “estaban controladas”, si bien era necesario “asegurar un control adecuado”.